Wall Street ha rebotado este viernes (Dow Jones:+0,52%; S&P500:+0,53%; Nasdaq:+0,52%) y ha logrado disipar, al menos parcialmente, las preocupaciones sobre las prácticas crediticias de los bancos regionales. Esto, mientras se mantienen las tensiones comerciales con China y el cierre de Gobierno, que también afectan al sentimiento de los inversores.
Todo ello después de que Zions Bancorp y Western Alliance hayan anunciado que esperan grandes pérdidas en sus cuentas luego de que dos fondos a los que habían prestado más de 150 millones de dólares hayan incurrido en irregularidades.
Concretamente, Zions ha dado a conocer que establecerá una provisión tras haber identificado «aparentes tergiversaciones e incumplimientos contractuales por parte de los prestatarios y deudores, así como otras irregularidades».
Por su parte, Western Alliance, que prestó casi 100 millones de dólares, ha reconocido que un prestatario había cometido fraude al violar un acuerdo de préstamo comercial y de garantía, contra el que ha iniciado una demanda por «no proporcionar préstamos con garantía en primera posición».
«Dos bancos regionales: Zions Bancorp y Western Alliance, anunciaron que iban a dotar provisiones para cubrir pérdidas generadas por varios prestatarios vinculados a otras entidades crediticias del sector y contra los que iban a presentar demandas de fraude», señalan en Link Securities.
«Aunque no se dieron nombres, en el caso de la primera de estas entidades todo parece indicar un vínculo directo con las recientes quiebras de dos empresas ligadas con la denominada ‘banca en la sombra’ y con la industria automotriz: Tricolor Holdings y First Brands. Si bien, todo parece indicar que este es un tema puntual y muy concreto, los inversores muestran cierta inquietud, tratando a todo el sector de la banca regional estadounidense de la misma forma», añaden.
Para Stephen Innes, socio gerente de SPI Asset Management, el «fantasma bancario regional regresa de las sombras». «La chispa surgió del propio patio trasero de Estados Unidos. Zions y Western Alliance revisaron sus carteras de préstamos y encontraron esqueletos: préstamos fraudulentos, garantías deficientes y ecos de la resaca del SVB de 2023. El mercado, siempre supersticioso, no necesitó un segundo recordatorio de que los ‘incidentes aislados’ no suelen permanecer aislados por mucho tiempo«.
Es más, este experto comenta que «es como si el mercado crediticio hubiera estado funcionando con una calma prestada, un truco de magia donde el apalancamiento se escondía tras una ilusión. Ahora, esa ilusión se está desmoronando».
Con todo, los índices americanos han finalizado una semana alcista, liderada por el Nasdaq (+2,14%), seguido por los avances del 1,70% en el caso del S&P 500, y del 1,56% para el Dow Jones.
GUERRA COMERCIAL, CIERRE DEL GOBIERNO…
En este escenario, continúa la guerra comercial entre EEUU y China, que firmaba un nuevo capítulo el pasado viernes después de que Donald Trump amenazase al gigante asiático con «aranceles del 100%» a partir del 1 de noviembre en represalia por las nuevas restricciones de Pekín a las exportaciones de tierras raras.
El portavoz del Ministerio de Comercio chino, He Yongqian, ha acusado a Washington de causar «pánico» por las tierras raras, pero se ha mostrado abierto a negociar para alcanzar una tregua que ponga fin a las hostilidades comerciales entre ambas potencias.
En este sentido, los analistas de Bankinter no descartan la «posibilidad de una intensificación más compleja y agresiva de lo esperado en las negociaciones comerciales entre EEUU y China antes de la reunión Trump/Xi del 29 de octubre».
A esta situación hay que sumarle el cierre del Gobierno estadounidense, ya en su tercera semana, lo que ha provocado un apagón de datos económicos oficiales, aunque el IPC de septiembre finalmente se conocerá el viernes 24 de octubre.
«El cierre parcial del Gobierno de EEUU parece que se extenderá cierto tiempo porque ambas partes carecen de estímulos para llegar a un acuerdo. Esto obliga a ir a ciegas con respecto a la macro americana porque no se publican indicadores federales», agregan en Bankinter.
OTROS MERCADOS
En otros mercados, el petróleo West Texas ha subido un 0,23% ($57,59) y el Brent ha avanzado un 0,46% ($61,34). Por su parte, el euro se ha depreciado un 0,17% ($1,1667), y la onza de oro ha perdido un 1,53% ($4.238).
Además, la rentabilidad del bono americano a 10 años ha repuntado al 4,005% y el bitcoin se ha dejado un 1,45% ($106.527).