La Guardia Civil y la Policía Local de Palma, en una operación conjunta, han desmantelado un importante punto de vertido y gestión ilegal de residuos ubicado en la zona de Son Reus y en el que encontraron escombros, vehículos, embarcaciones y hasta tres ponis.
La investigación, liderada por el Grupo de Investigación y Seguimiento de Denuncias del cuerpo municipal y del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) del Instituto Armado, comenzó hace un año y se centró en una finca rústica en la que sospechaban que se desarrollaba una actividad ilegal.
El pasado 30 de julio, ha informado la Policía Local, se llevó a cabo una inspección del terreno y los agentes constataron que funcionaba como un vertedero ilegal de grandes dimensiones.
Acumulaba más de 1.000 metros cúbicos de escombros, restos de fibrocemento –uralita–, arena de sílice, vehículos, embarcaciones y tres ponis sin identificar. La unidad de drones del cuerpo municipal obtuvo evidencias gráficas que fueron determinantes para la resolución del caso.
Los investigadores han identificado a los supuestos responsables de la finca, quienes se enfrentan a denuncias por infringir la ley autonómica de residuos y suelos contaminados.
La actuación, ha sostenido la Policía Local, pone de manifiesto el compromiso de ambos cuerpos con la protección del medio ambiente y la lucha contra las actividades ilegales que suponen un grave riesgo para el entorno natural y la salud pública.