El Rita aún mantiene el aire de bar mallorquín, de planta baja mediterránea, con su oscuridad, baldosas originales y persianas verdes. Primero fue el bar ABC, pero a su actual responsable no le gustaba demasiado el nombre. “Cuando lo cogí era un lugar que tenía muchas capas de historia, cada uno de los responsables había dejado su huella con la decoración. No tuve que invertir mucho, sólo ir limando y retirando esos añadidos para dejarlo en su estado más primigenio. Ha quedado la barra original y sacamos a la luz las vigas de madera”, relata Joan Vallespir, el costitxer que rebautizó el bar que nació en los años cuarenta frente a la iglesia del Socors. Sondeó nombres, pero ninguno obtuvo el beneplácito de clientes y amigos. “Al final, pensé en Rita, que coincide con el nombre de una de las capillas del Socors; además es corto y suena bien”, comenta.
Sociedad

Mallorca

Nacional