Una de las diez novelas finalistas del Premio Planeta 2025 tiene por protagonista a una mujer criada por sus abuelos en la Galicia rural y este miércoles por la noche (23 horas) se sabrá si esta historia firmada con seudónimo (Sofía García) logra el codiciado galardón dotado con un millón de euros (y 200.000 euros para la obra finalista) . La decisión se anuncia durante una gran gala de entrega en el Museu Nacional d’Art de Catalunya.
Una mujer con una extraña dolencia
«Un drama histórico con tintes góticos y mucho lirismo, una trama sobre el silencio y la memoria»; así ha descrito Luz Gabás, portavoz del jurado del 74 Premio Planeta de Novela ese libro con firma secreta. Su personaje protagonista sufre una extraña dolencia, motivo de que acabe internada en un hospital donde se ocultan varios horrores de experimentos con personas y donde descubre a su hermana gemela perdida. Ante esa sorpresa, con la ayuda de otro personaje (Daniel), Sofía consigue conocer la verdad «y juntos se abren camino hacia la esperanza», detalla la organización.
Precedente cercano
Más allá de saber si esa propuesta acabará ganando el millón de euros con el que está dotado el premio Planeta de Novela, ese hilo narrativo conecta con la historia de época de Sonsoles Ónega, madrileña con raíces gallegas, que ganó el Planeta en 2023 con Las hijas de la criada, libro que trata sobre los secretos de una familia gallega que construyó un imperio conservero a principios del siglo XX.
Más novelas finalistas
En cuanto al resto de las diez obras finalistas, así habló este martes en Barcelona Luz Gabás, portavoz del jurado (y ganadora en 2022) citando sus títulos y su respectiva autoría (o alias): Todos ríen, de Noelia Espinar: «Una novela de ciencia ficción con tono de crítica social, que está contada en tiempo presente»; Ghosting, de Salva Rubio: «Una novela actual, con humor, situada en los años 90 en el barrio del Borne, en Barcelona, y que alude al turismo masivo»; Por su gran culpa, de Mauro Corti: «Un thriller periodístico con toques de drama histórico, que se vive a través de un periodista que busca respuestas en Orellana (Argentina)«; No es tan fácil morir de amor, de Elvira Torres (seudónimo): «Una trama contemporánea, ágil, que muestra una crítica social con toque de thriller y se sitúa en Sevilla»; ¿No es hermosa la luna?, de Selene Noctis (seudónimo): «Es un thriller psicológico y una novela de amor situada en una isla, en su trama hay una serie de asesinatos que se sucedenal compás de la luna»; Zoltar el mago, el pirata Roberts y una novela del Oeste, de Keith Astra (seu.): «Escrita desde la ironía une al relato la ciencia ficción y la imposible conexión entre Napoleón, el planeta Gamínedes y el lejano Oeste»; La muerte de la diosa, de José Antonio Ariza: «Su acción nos lleva al origen de la civilización en la Edad de Bronce del Mediterráneo y habla de la discriminación de la mujer desde tiempos ancestrales»; El destino en la esfera de un reloj, de Enrique Alejandro Santoyo Castro: «Una novela histórica con enfoque romántico y político»; y Donde se escriben los nombres, de Blanca Montoya Landa: «Novela de época de narrativa intimista con un toque de misterio que alterna los tiempos, situada en Sudáfrica», concluyó Gabás.
Más conexiones con Galicia
En la historia del Premio Planeta de Novela y Galicia, al repasar el historial se aprecia que lo han ganado Fernando Bermúdez de Castro (con Pasos sin huellas, 1958), Gonzalo Torrente Ballester (Filomeno, a mi pesar, 1988), Camilo José Cela (La cruz de San Andrés, 1994) y varias autoras con raíces gallegas, caso de Soledad Puértolas (Queda la noche, 1989), Espido Freire (Melocotones helados, 1999) o la citada Sonsoles Ónega y en su nómina de finalistas sobresale la escritora pontevedresa Susana Fortes que logró esa distinción en 2003 (gracias a El amante albanés) y que presentó el pasado lunes en su Pontevedra natal un nuevo libro titulado Sólo un día más, cuya trama alude a la correspondencia entre el filósofo Albert Camus y la actriz María Casares.











