David Bustamante ha visitado el plató de El Hormiguero, donde se ha mostrado sincero y contundente al hablar sobre su vida personal, su salud y la presión mediática que enfrenta diariamente. La conversación se centró en un tema que a menudo genera titulares: su físico y los cambios en su peso.
“¿Por qué es tan tema de conversación, si engordas, si adelgazas…?”, preguntaba Pablo Motos. Bustamante respondió con claridad: “A mí lo que me molesta es que, con todas las cosas que hago, de lo único que hablen es de algo que no les importa para nada. Les da igual”, afirmaba.
El cantante no se quedó ahí y denunció la crueldad que a veces se esconde detrás de los comentarios negativos: “No lo hacen por mi bien. Ellos, cuando ven a alguien débil o en un momento más gris, lo único que hacen es ponerle un pie en el cuello para que no levante cabeza, y eso es muy cruel. No hay algo más ruin en esta vida que ser cobarde, esconderte en las redes sociales y hacer daño a una persona que tiene sentimientos, que tiene una hija de 17 años...”, decía.
Bustamante quiso también dejar claro que se siente respaldado por sus seres queridos y consciente de su propio proceso: “Tengo gente que me quiere y siempre lo he dicho. Soy consciente de dónde me encuentro en cada momento. Y hay veces que uno no tiene la fuerza de voluntad, que no encuentra el camino y hay que dar tiempo a las personas”. Añadió un mensaje contundente para quienes critican sin razón: “Cada uno tiene un espejo en casa, no me cansaré de repetirlo. Para saber cómo estamos. Cuando me pican. Esto es lo que hay”.
Una rutina de vida saludable y disciplinada
Más allá de las críticas, Bustamante compartió los hábitos que le ayudan a mantenerse en forma y cuidar su bienestar: “Yo me levanto cada mañana y hago una activación. Camino en ayunas cada mañana y entrenamos durante una hora fuerza. Es un ‘dologusto’. Y por la noche vuelvo a hacer una hora o hora y media de cardio. Ya sea nadando, jugando al tenis, al pádel… Que sea divertido”, decía.
El cantante también destacó la importancia de la alimentación: “He desterrado de mi vida muchas cosas. Como pocos hidratos, poca harina… no tomo azúcares. Los hidratos los adquiero a través de las verduras, como proteínas y no bebo refrescos ni alcohol. He notado una mejora increíble”, añadía.














