Wall Street cotiza con signo mixto este martes tras el rebote del lunes, después de que Donald Trump haya rebajado el tono amenazador con China. No obstante, el mercado permanece atento a la guerra comercial, al presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, y a los resultados de los grandes bancos de EEUU.
Sobre las tensiones comerciales, el secretario del Tesoro de EEUU, Scott Bessent, ha criticado al Gobierno chino por los controles impuestos a la exportación de tierras raras, aunque no ha descartado que Donald Trump y Xi Jiping se reúnan en la cumbre de la APEC que se celebrará en Corea del Sur a finales de mes.
En declaraciones a ‘Financial Times’, ha señalado que China está «en medio de una recesión/depresión» y que sus diriegentes «quieren arrastrar a todos los demás con ellos«.
Por su parte, el Representante Comercial de Estados Unidos, Jamieson Greer, ha advertido que los aranceles del 100% a China «dependen» de los movimientos de Pekín. «Mucho depende de lo que hagan los chinos. Ellos son los que han elegido hacer esta gran escalada».
Además, hoy han entrado en vigor las tarifas portuarias mutuas que han impuesto ambos países a las empresas de transporte marítimo, en un nuevo frente de la guerra comercial entre las dos economías más grandes del mundo.
Al mercado tampoco le ha gustado que China haya sancionado a las unidades estadounidenses de un gigante naviero surcoreano y haya amenazado con más medidas de represalia contra la industria.
«Se espera que el presidente Trump se reúna con su homólogo chino, Xi Jinping, dentro de dos semanas en Corea del Sur, y prevemos que la retórica podría intensificarse antes de este encuentro, con ambas partes intentando obtener ventaja. Esto podría generar cierta volatilidad en los activos de riesgo en los próximos días. Sin embargo, los inversores aún pueden albergar esperanzas de un acuerdo comercial entre China y EEUU, ya que, en última instancia, sería mutuamente beneficioso para ambas partes y también podría desencadenar un gran rally de Santa Claus antes de que finalice el cuarto trimestre», valora Kathleen Brooks, directora de investigación de XTB.
Esto, mientras se mantiene el cierre del Gobierno estadounidense y el apagón informativo, aunque el dato de inflación de septiembre, previsto inicialmente para este miércoles, se publicará el próximo viernes, 24 de octubre.
«En EEUU, la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS) publicó un comunicado indicando que el IPC de septiembre se publicará el 24 de octubre. El comunicado también reiteró que no se reprogramarán ni publicarán otras publicaciones hasta la reanudación de los servicios gubernamentales regulares. Esto implica que las cifras del IPC se publicarán durante el periodo de suspensión de la actividad del FOMC antes de la reunión de octubre», afirman en Danske Bank.
CON LA MIRA EN POWELL
Y con este telón de fondo, los inversores han seguido muy de cerca el discurso de Powell sobre perspectivas económicas y política monetaria en la Reunión Anual de la Asociación Nacional de Economía Empresarial (NABE), en Filadelfia (Pensilvania). Sin embargo, el titular de la Fed no se ha pronunciado sobre la futura evolución de los tipos de interés.
Como viene siendo habitual, Powell se ha vuelto a aferrar este martes a los datos para tomar las decisiones de política monetaria, a pesar de que el banco central no ha podido conocer algunos de los indicadores más relevantes de las últimas semanas por el cierre del Gobierno.
«Aunque algunos datos gubernamentales importantes se han retrasado debido al cierre, revisamos periódicamente una amplia variedad de datos del sector público y privado que siguen disponibles. También mantenemos una red nacional de contactos a través de los Bancos de la Reserva, quienes aportan información valiosa, que se resumirá en el Libro Beige de mañana», ha precisado.
Cabe recordar que el banco central estadounidense celebrará una nueva reunión de política monetaria el 29 de octubre, para la que el mercado descuenta, con una probabilidad del 97,8%, según la herramienta FedWatch de CME, otro recorte de tipos de 25 puntos básicos.
LOS GRANDES BANCOS RINDEN CUENTAS
Desde el punto de vista empresarial, la gran banca de EEUU se confiesa ante el mercado. Este martes ha sido el turno de los resultados trimestrales de JP Morgan y Wells Fargo, que han superado previsiones, al igual que han hecho Citi y Goldman Sachs con sus cifras.
En concreto, las ganancias de JP Morgan Chase aumentaron en el tercer trimestre gracias al impulso de su banca de inversión, hasta 14.390 millones de dólares o 5,07 dólares por acción, mientras que Wells Fargo ha elevado su beneficio neto un 9,29%, hasta alcanzar los 5.589 millones.
Por su parte, los beneficios de Citi aumentaron un 16% en el tercer trimestre (3.752 millones de dólares), y Goldman Sachs ganó 4.100 millones de dólares, o 12,25 dólares por acción, en comparación con 2.990 millones de dólares, o 8,40 dólares por acción, de hace un año.
EL FMI ELEVA SUS PREVISIONES
La agenda de este martes también incluye el último informe del Fondo Monetario Internacional (FMI), en el que ha revisado al alza su previsión de crecimiento económico mundial para 2025, y ahora espera un incremento del 3,2%, lo que supone una mejora de 20 puntos básicos desde sus proyecciones de julio debido a que «el impacto arancelario es menor de lo anunciado inicialmente».
El organismo también ha mejorado su previsión de crecimiento para la economía española en 2025 hasta el 2,9%, cuatro décimas más de lo anticipado el pasado mes de abril, y ha elevado al 2% el PIB de 2026, una mejora de dos décimas respecto del último pronóstico de la institución con sede en Washington.
OTROS MERCADOS
En otros mercados, el petróleo West Texas baja un 2,15% ($58,21) y el Brent cede un 2,16% ($61,95). Por su parte, el euro se deprecia un 0,1% ($1,156), y la onza de oro gana un 0,44% ($4.152).
Además, la rentabilidad del bono americano a 10 años se relaja al 4% y el bitcoin pierde un 3% ($11.865).