Los embutidos de Koldo

Tendemos a refugiarnos en la verdad como cueva clarificadora de lo inexplicable. Lo cierto es que la verdad única no existe. Siempre está retocada por la interpretación de los hechos. Es un clásico. Los más inocentes aseguran que no es así, pero el día a día insiste en que esa es la única forma de entender las posiciones divergentes ante cualquier cuestión.

Fuente