Unas 150 personas se concentraron ayer en la plaza de España de Palma convocadas por la Asamblea Antirracista de Mallorca, bajo el lema ‘Mallorca antifeixista, antiracista i antixenòfoba’. La movilización,que coincidió con la celebración del 12 de octubre, denunció el racismo institucional, las políticas migratorias europeas y los discursos de odio.
Se escucharon consignas como ‘Mallorca será antifascista’ o ‘Ganaremos esta lucha cueste lo que cueste’, y se rindió homenaje a las personas fallecidas en la valla de Melilla. El manifiesto fue traducido a lengua de signos.
Sin embargo, hubo momentos de tensión cuando varios jóvenes aparecieron con la intención de boicotear la manifestación, ataviados con banderas de España, lo que provocó un leve altercado en el que intervinieron los policías. Los organizadores pidieron en todo momento, incluso antes de este incidente, no responder a las provocaciones y paz entre los asistentes, pero aun así se vivieron varios enfrentamientos.
En su comunicado, la Asamblea denunció el «modelo de racismo estructural que excluye a la clase trabajadora» y reclamó la regularización de las personas migrantes y el cierre de los centros de internamiento de extranjeros (CIE). «No basta con no ser racistas, hay que ser antirracistas», concluyeron los convocantes.









