Hace solo un año, el presidente del Gobierno anunciaba que el aborto podría estar blindado en nuestra Constitución. Sin embargo, esa idea se esfumó debido a la falta de apoyos. Pero casualidad o no, justo cuando entramos en un otoño que será bastante complicado para Sánchez, la propuesta ha vuelto a retomarse.
La presidenta de la Comunicad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, junto a los presidentes autonómicos de Asturias, Aragón y Baleares, han mandado una carta a Sánchez en la que xige que garanticen el derecho al aborto de las mujeres en la sanidad pública y que, para ello, pongan en marcha el registro de objetores de conciencia, como marca la ley. Desde el Gobierno, la Ministra de Sanidad, Mónica García advierte de que tendrán que aplicarlo sí o sí.
Desde el Ejecutivo les han dado un ultimátum, por lo que tienen tres meses en poder ejecutar esta medida. Precisamente, Mónica García ha presentado esta mañana en el Consejo de Ministros un informe que muestra la situación de los abortos practicados en la sanidad pública en los últimos años. Se trata de cifras que, aunque han ido subiendo, siguen siendo de una minoría respecto a los realizados en la privada, con grandes diferencias por comunidades.
Unas
cifras que no dejarán de crecer
Las estadísticas indican que el número de abortos siguen subiendo con el paso de los años. Tan solo en 2024, se registraron más de 100.000, unas cifras que han marcado el récord absoluto. Y mientras eso pasa, los médicos, que por ética deciden no realizar esta práctica, quedan señalados. La Ministra de Igualdad, Ana Redondo, asegura que ambos derechos, tendrán que convivir juntos.
¿Por qué no se respeta el derecho de los profesionales?¿Puede el Gobierno imponer la Ley? Hablamos del aborto en ‘La Linterna‘ y de la objeción de conciencia en los profesionales médicos.
No ha sido fácil encontrar testimonios sobre este asunto. Para que te hagas una idea, hemos hablado con algunos profesionales que aunque defienden la objeción de conciencia no quieren expresarlo públicamente. Se sienten señalados, amenazados e incluso apartados durante su día a día. Es una muestra de que cada vez es más complicado ejercer con libertad este derecho.

Embarazada
Hablamos de una práctica clínica que, en muchos casos no se realiza ni siquiera una ecografía previa. Tampoco se muestran las imágenes del feto a la mujer que va a abortar. Algo que hace que se limite el ejercicio del consentimiento informado, ya que la paciente no dispone de toda la información necesaria para tomar una decisión que es realmente importante.
Así lo expresaba José Antonio Díez Fernández es Doctor en Derecho y Coordinador General de ANDOC (Asociación para la Defensa del Derecho a la Objeción de Conciencia). “Son bastante reacios a aparecer en medios, cuando su postura puede acarrearles algún tipo de señalamiento. El riesgo de que te puedan discriminar es alto, sobre todo si son médicos jóvenes y trabajan en la Sanidad Pública, pero lo entiendo”.
¿Está
en peligro la objeción de conciencia?
Desde el PSOE, continúan insistiendo a varias comunidades en crear y regular ese Registro de Personas Objetoras para cumplir así con el mandato que dictamina la Ley aprobada por el Gobierno.
Se trata de un impulso que quiere dar el Ministerio de Sanidad para que los abortos se incrementen en los centros públicos. Una idea que va lógicamente en contra de la objeción de conciencia de muchos profesionales sanitarios.
Lo peor está siendo la delicada situación en la que quedan muchos de estos profesionales que se niegan a realizar esta práctica. En algunos casos se ha llegado a amedrentar o asustar al propio médico únicamente porque se les está imponiendo una práctica que va en contra de sus creencias o valores.

Asociaciones provida analizan los datos de aborto de España
“Es un derecho reconocido por todos los documentos internacionales, lo que tiene que hacer un profesional de la salud es informar a sus directores médicos y superiores, y si se ve precisado, dar información al paciente” explicaba el doctor.
El tema es que, si en algún momento, se blinda el aborto como un derecho constitucional, la objeción de conciencia podría correr peligro. “Si incluyen el aborto como un derecho, sería dejar la objeción de conciencia muy arrinconada. Lo que pretenden es esta guerra declarada con la objeción de conciencia” sentenciaba.