Los fallos en el cribado andaluz de detección precoz del cáncer de mama han encendido las alarmas. Lo que comenzó como una incidencia controlada que afectaba a «dos o tres mujeres», en palabras de la consejera de Salud, ha terminado siendo una crisis de reputación que, además de sacar a la palestra un problema que se llevaba denunciando desde hacía años, también ha afectado al inicio del año electoral de la Junta de Andalucía. Ahora, Por Andalucía reclama al Servicio Andaluz de Salud (SAS) que, tal y como está haciendo con el cribado del cáncer de mama, también revise «con urgencia» el del cáncer de colon y el de cuello de útero.
En un intento de enviar un mensaje de calma y revertir un problema de salud pública, la consejería de Rocío Hernández informó el pasado miércoles que el SAS se iba a poner en contacto con 2.000 mujeres que, en los últimos tres años, los resultados de su mamografía habían sido «no concluyentes». Tal como puntualizaba Hernández en un comunicado, «el 98% de los expedientes dudosos son tumores benignos».
Al igual que partidos como el PSOE, este grupo parlamentario también ha denunciado la «grave situación» del programa de cribado de cáncer de mama en Andalucía. Por ello, han exigido al SAS una revisión urgente de los programas de detección precoz de estos dos tipos de cáncer donde el diagnóstico precoz también puede salvar vidas.
Revisión de otros cribados
Según Por Andalucía, el objetivo de pedir la revisión de los protocolos del cáncer de colon y cuello de útero es «evitar que se repitan las mismas deficiencias y garantizar la salud de todas las personas participantes en este tipo de cribados». La portavoz del grupo político, Inmaculada Nieto, ha acusado a la Junta de Andalucía de «falta de transparencia y de ofrecer versiones contradictorias» sobre la gestión de esta crisis.
«¿Cómo puede ampliarse el cribado de mama a más mujeres si al mismo tiempo se reconoce que quienes ya tienen sospechas de cáncer deben esperar hasta un año para confirmar el diagnóstico? Esto no es solo negligencia, es una irresponsabilidad que pone vidas en riesgo», ha advertido Nieto.
Según la portavoz, desde que se conoció el testimonio de las afectadas la Junta ha ofrecido explicaciones «contradictorias»: desde negar retrasos en las pruebas a desconocer los problemas o decir que revisar las historias clínicas era ilegal.
«Estas declaraciones demuestran un absoluto desprecio hacia las mujeres andaluzas y su derecho a una atención sanitaria digna», ha incidido Nieto, quien ha subrayado la magnitud de los cribados en Andalucía.
Amama se plantea demandar al SAS
A pesar de que se desconoce el volumen de mujeres afectadas por los retrasos y «errores de comunicación» -como lo ha definido Salud- en el cribado del cáncer de mama, la Asociación Amama, entidad que destapó esta situación, asegura que solo esta semana han recibido la llamada de más de un centenar de mujeres que se han visto perjudicadas por los fallos. Este periódico también habló con algunas de estas afectadas.
La propia asociación, formada por pacientes oncológicas, está contemplando poner una demanda al SAS por «negligencia estructural». Este martes 7 de octubre está prevista una reunión entre las miembros de la asociación para tomar una decisión.
Además de los retrasos en el cribado, Amama denuncia retrasos en las revisiones oncológicas de hasta un año en hospitales como el Virgen del Rocío. Pacientes con las que se ha puesto en contacto este periódico, como Amparo o Lola, han contado sus experiencias como afectadas por los retrasos en el cribado. En el caso de Lola, ha tenido un retraso de más de seis meses para su revisión anual con el oncólogo.
Una ampliación «propagandística»
En 2024, el programa de cuello de útero alcanzó a 58.875 mujeres de entre 25 y 65 años, mientras que el cribado de cáncer de colon incluye a más de 2,3 millones de personas de 50 a 69 años, con una participación del 40,6 %, casi un millón de personas.
Para Por Andalucía, la reciente ampliación del rango de edad en el cribado de mama es solo una maniobra propagandística que busca tapar las carencias del sistema.
«No necesitamos más anuncios publicitarios, sino explicaciones claras, responsabilidades asumidas y atención inmediata a todas las mujeres con pruebas sospechosas. Estamos hablando de salvar vidas», ha reiterado Nieto, quien ha pedido que se refuercen los recursos sanitarios y depurar responsabilidades.