José Elías es uno de los empresarios más importantes de España. El dueño de La Sirena y presidente de Audax Renovables ha conseguido acumular un gran patrimonio que lo sitúa en el puesto número 49 de la lista Forbes, con más de 900 millones de euros.
Muchos jóvenes quieren aspirar a ser como él. Por este motivo, el presidente de Audax Renovables es un habitual de muchas tertulias televisivas y también se ha convertido en coach empresarial. Además, sus opiniones personales en X (antes Twitter) generan mucho debate entre la sociedad española.
Una de las últimas opiniones que ha compartido el empresario se refiere a los empresarios españoles que siguen trabajando a los 70 años. «Hay empresarios en España trabajando con 70 años. Y no por gusto precisamente. Es porque están atrapados», empieza diciendo en el escrito.
El multimillonario comenta que cuando una persona se mete de lleno en crear su proyecto personal, al final se convierte «en una jaula de oro cuando quieren jubilarse». El principal problema es que «tienes una SL con empleados, no puedes simplemente bajar la persiana para jubilarte como si fueras autónomo y estás solo».
El empresario señala que «la ley te obliga a liquidarla, y eso supone pagar la indemnización por despido a toda tu plantilla», algo que hace que sea un coste inasumible para la mayoría.
Elías comparte que esta situación deja «al empresario con muy pocas salidas, y ninguna es sencilla». Por ello, da tres opciones:
- Encontrar un comprador que quiera continuar con el negocio.
- Ceder la empresa a un familiar, si es que lo hay y está dispuesto.
- Asumir un coste de cierre altísimo que puede comerse los ahorros de toda su vida.
Con este contexto, Elías no da crédito, pues «te pasas 40 años creando empleo y riqueza, y al final, ese mismo empleo te impide retirarte en paz». La solución que propone es la compraventa de pymes para que «el empresario que se retira obtenga el valor que merece por su trabajo».
No tiene dudas de que «es la forma más inteligente de garantizar que el esfuerzo de toda una vida no termine en una liquidación».