El periodista económico de ‘ABC’, José María Camarero, ha desgranado en el programa ‘El Cascabel’ de TRECE un reciente informe de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) que establece cuál es el tiempo perfecto de trabajo para sacar el máximo rendimiento a la jubilación. La conclusión es clara: la cifra ideal es de 36 años y medio de cotización. Como ha explicado el experto, esto no significa que se vaya a cobrar la pensión más alta, sino que se obtiene la mejor rentabilidad en función del esfuerzo de cotización realizado.
A partir de los 36 años y medio cotizados, «proporcionalmente, la pensión que vas a recibir no es tan generosa como si has cotizado menos», ha señalado Camarero. La explicación se encuentra en los mecanismos de corrección del sistema para proteger las carreras laborales más cortas, que reciben ayudas como los complementos a mínimos o por brecha de género. Por tanto, una persona que ha cotizado 45 años «cobra más nominalmente todos los meses, pero proporcionalmente, hace un esfuerzo mucho mayor para tener esa pensión» que alguien que solo ha cotizado 25 años.
La generosidad y sostenibilidad del sistema
Esta realidad, según el periodista, no busca «incitar a que la gente no cotice», sino que pone de manifiesto «cuán generoso es el sistema de pensiones que tenemos». El informe de Fedea demuestra que el Estado aporta sustentos y ayudas para garantizar que «todo el mundo tenga una pensión digna», pero este esfuerzo colectivo debe ser financiado.
La gran pregunta sobre la sostenibilidad del sistema de pensiones sigue vigente. Camarero ha explicado que el sistema, al ser esencialmente público, «se nutre fundamentalmente de las cotizaciones sociales». Sin embargo, estas aportaciones «no llegan y no van a llegar, al menos durante los próximos 15 o 20 años» para cubrir todos los gastos.
El principal reto es la jubilación de la generación del ‘baby boom’, nacidos entre finales de los 50 y mediados de los 70. En aquellos años «nacían en España más de 600.000 bebés al año, que eso no ocurre ahora». Esta generación, que ha tenido buenas carreras de cotización, accede ahora a pensiones elevadas que el sistema debe soportar.
Para cubrir este déficit, el Estado realiza inyecciones de capital a la Seguridad Social, que el año pasado ascendieron a 50.000 millones de euros. «Eso se transforma en deuda, evidentemente, eso es una deuda pública que vamos asimilando», ha advertido el experto, recalcando que, aunque las pensiones «se pagan», se está generando una deuda importante que habrá que afrontar en el futuro.

Un sistema en reforma constante
José María Camarero también ha recordado que el sistema de pensiones «no ha parado de reformarse en las últimas décadas». Ha mencionado reformas de gran calado como la del gobierno de Zapatero, que elevó la edad de jubilación de los 65 a los 67 años. Actualmente, la edad legal se sitúa en 66 años y 8 meses, y aumentará progresivamente hasta alcanzar los 67 años en 2027. Estas reformas, según el periodista, «son habituales, son constantes» y seguirán siendo necesarias para garantizar la sostenibilidad.