El nivel de alerta decretado por la Agencia Estatal de Meteorología para este martes es naranja para varios puntos de la Comunitat Valenciana y, con este cambio, las zonas más golpeadas por el agua este lunes podrán respirar un poco más tranquilas. La de este 29, cuando se cumplen once meses de la dana del pasado octubre, ha sido una jornada de alerta roja por lluvias torrenciales en la que el recuerdo de la tragedia ha estado muy presente, especialmente en la zona cero, aunque el grueso del impacto, sobre todo hasta primera hora de la tarde, se dio en La Safor y Castellón. Después, las precipitaciones más importantes se registraron en la Ribera Alta y Ribera Baixa, con calles y viviendas anegadas en varias municipios como Alzira, Cullera y Sueca e incluso un reventón húmedo en el Mareny de Barraquetes, que dejó rachas de hasta 113 kilómetros por hora. Al última hora de la tarde, lo peor del temporal se había desplazado al mar, pero no se descartaba que golpease a València y su área metropolitana durante la noche o madrugada.
La Comunitat Valenciana ha recibido la lluvia en un cierto estado de parálisis ante el temor a la repetición y aumentado por las medidas de prevención para que el episodio fatal de la dana no se repita. La alerta roja, que afecto al litoral de Valencia desde las 4:00 horas de la madrugada y al norte de Castellón desde las 20:00 horas del domingo, se ha mantenido hasta la medianoche de este lunes. A partir de ese momento ha entrado en vigor la alerta naranja por lluvias, que se prolongará hasta el mediodía del martes. En la Safor, la previsión apunta a que la alerta pasaría a amarilla durante la jornada del martes.
Lluvia en Alzira / Agustí Perales Iborra
Una alerta roja once meses después de la dana
Pero el lunes, la alerta roja por lluvias ha dejado acumulados de hasta 224 litros por metro cuadrado en la estación meteorológica de la Caldereta de Gandia, el registro más elevado de la jornada. La estación en el límite con Barx recogió esta cantidad en apenas ocho horas, mientras que en el propio término vecino se superaron los 200 litros en varias estaciones. En la comarca de la Vall d’Albaida, Pinet registró 187 litros hasta las 14 horas, convirtiéndose en uno de los puntos con mayor intensidad de precipitaciones.
La intensa tormenta se fue desplazando por la tarde a las comarcas de la Ribera Alta y la Ribera Baixa, donde la tromba de agua obligó a cortar calles y carreteras, como en el caso de Alzira, y donde se recibieron decenas de llamadas de emergencia por garajes y plantas bajas que se estaban inundando, como ocurrió en Cullera y Sueca. «La situación se ha descontrolado en cuestión de minutos«, decia el alcalde de Mareny de Barraquetes, Jordi Sanjaime, tras un reventón húmedo que dejó rachas de hasta 113 kilómetros por hora. Más en el interior, la reactivación de un tren de tormentas que estaba afectando al área prelitoral provocó inundaciones en carreteras de Yátova, Chera y Utiel que también tuvieron que ser cortadas.
Y en la zona cero de la dana del 29 de octubre, Aldaia contabilizó 56 litros en 35 minutos, lo que provocó durante la madrugada el desbordamiento parcial del barranco de la Saleta. En esta localidad, el centro comercial Bonaire decidio cerrar por completo ante la evolución del temporal. Ayuntamientos y vecinos de l’Horta Sud afrontaron el día, desde primera hora, muy pendientes de los barrancos, con coches aparcados en alto, comercios cerrados, calles prácticamente vacías y las autoridades avisando a la población con megafonías sobre cómo protegerse y dónde aparcar los vehículos privados ante la previsión de lluvias continuadas .
El agua volvió a discurrir por el nuevo cauce del Túria aunque con un caudal que fue aumentando de forma progresiva durante la jornada. Las lluvias caídas en cabecera durante la noche dejaron una escorrentía que fue subiendo conforme avanzó el episodio de precipitaciones. Desde la Confederación Hidrográfica del Júcar se hizo un seguimiento de ríos y embalses desde que se activara la alerta la tarde del domingo, con la sala de guardia del Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) operativa toda la noche.

Sacos para proteger el interior de los bajos del agua en Algemesí / Agustí Perales Iborra
Sanidad y Educación toman medidas
Esta vez, las medidas de prevención no han tardado, sobre todo en materia educativa y sanitaria. Un total de 243 municipios habían suspendido su actividad lectiva para este lunes ante la situación meteorológica, con lo que, hasta 542.964 alumnos de la Comunitat Valenciana no han acudido este lunes 29 de septiembre a clase. Las universidades también cancelaron la docencia presencial. Para el martes, varios municipios ya han anunciado la continuidad de las suspensiones.
No solo en educación, también en Sanidad se han adoptado medidas para garantizar que nadie se quede sin atender. Si no se pueden desplazar, los pacientes no perderán la cita en los centros de salud y hospitales. Así lo ha decidido la Conselleria de Sanidad, y lo ha comunicado a los móviles de la Comunitat Valenciana con más de seis millones de mensajes, bien vía mensaje de texto (4,2 millones), bien a través de notificaciones en la aplicación GVASalud (2 millones). Además, un total de 1.130 profesionales no han asistido a su puesto de trabajo; es la suma de los ausentes en todas las categorías, desde los facultativos hasta los celadores y personal administrativo. Por su parte, los centros de día de 243 municipios han cerrado este lunes por la alerta roja.
Cancelaciones: ferias, juicios, un partido y un acto con el rey
La lluvia ha dejado tras de sí un reguero de actos suspendidos o cancelados en una Comunitat Valenciana en vilo. Por ejemplo, el acto de apertura del curso universitario español que iba a celebrarse el martes en la Universitat de València con la presencia del rey Felipe VI ha sido pospuesto, aunque no cancelado. La ministra de Ciencia, Diana Morant, ha destacado que no tendría sentido pedir a los rectores de toda España que se desplazaran a Valencia cuando se había recomendado a la población evitar desplazamientos. Aún no hay fecha para su celebración.

Una persona en Mestalla cuando se ha cancelado el partido de este lunes por la tarde / Miguel Angel Montesinos
Del mismo modo, el partido de fútbol entre el Valencia CF y el Oviedo, previsto para el lunes por la tarde en Mestalla, ha sido aplazado para el martes a las 21:00 horas. La decisión se tomó pocas horas antes del encuentro, con el Oviedo ya en la ciudad y los jugadores del Valencia camino del hotel de concentración. Asimismo, Feria Hábitat Valencia y Textilhogar han aplazado su apertura para el martes, el Ayuntamiento de València ha suspendido el pleno municipal, y el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana ha acordado ante la alerta roja la dispensa de acudir a actuaciones jurisdiccionales si concurre causa de fuerza mayor.
La movilidad, a medio gas
La parálisis en la que se han sumido los municipios de la Comunitat Valenciana se ha trasladado a su transporte. Metrovalencia ha mantenido durante la jornada del lunes los convoyes circulando con horario de sábado, mientras que Renfe ha mantenido los viajes, si bien permite cambiar o anular de forma gratuita los billetes ya adquiridos de los trayectos afectados por el aviso rojo, incluyendo el AVE Madrid-València, los Cercanías en la provincia de Valencia y algunos trenes de Media Distancia. En Cercanías, en la línea Gandia-València, la precipitación no ha llegado a interrumpir la circulación de trenes, aunque la inundación de las inmediaciones de la estación de Xeraco ha impedido durante varias horas el acceso y la salida de viajeros.
En estas circunstancias, el conseller de Emergencias, Juan Carlos Valderrama, ha recomendado promover el teletrabajo, excepto en servicios esenciales. La Conselleria de Empleo ha incidido en el derecho de los trabajadores de no asistir a su puesto de trabajo en caso de emergencia declarada, amparados por el llamado ‘permiso climático’ recogido en el Real Decreto-ley 8/2024. Así, empresas como Ford han paralizado su actividad durante el lunes y el martes, mientras que los supermercados de Consum han permanecido cerrados durante la jornada, en total 182 tiendas, así como las del grupo Inditex. Ikea, por su parte, ha mantenido abierto su parking en altura para que los propietarios de vehículos pudieran ponerlos a salvo del agua.
Se reabre el conflicto político por la dana
En el plano político, como era de prever, la jornada reabrió la guerra que Consell y Gobierno vienen librando desde la dana del 29 de octubre. Las diferencias en la gestión de ambas emergencias, competencia de la Generalitat, fueron el principal punto de fricción. La delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, abrió fuego bien temprano para remarcar que esa distancia entre operativos, con el ejemplo de la hora del envío del Es Alert, “evidencia” que desde el ejecutivo de Mazón “no se hicieron las cosas bien” en la prevención de la riada de octubre de 2024.
El Consell, por su parte, se mantuvo aferrado a su relato y justificó esa mayor anticipación y coordinación bajo la tesis de que en este caso sí han dispuesto de previsiones por adelantado por parte de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y el 29-O, no. La portavoz Susana Camarero defendió tras una reunión extraordinaria del Consell que «en esta ocasión [Aemet] ha avisado con antelación y eso permite tomar medidas preventivas y actuar», mientras «hace un año comunicaba lo que ya estaba ocurriendo».
Tras su ausencia de hace un año, el papel de Mazón en esta emergencia también se miró con lupa. El president no compareció ni el domingo ni ayer lunes y tampoco acudió a las reuniones de coordinación, pero según Camarero ha estado “atento a la situación”.
La cronología expuesta por Camarero indica que Mazón salió de Murcia -donde tuvo unas jornadas del PP desde el viernes- a las 13.00 horas del domingo, “ya estaba” en la C. Valenciana en torno a las 14 horas y llegó a Valencia “al final de la tarde”. Evitó concretar, sin embargo, si el president siguió la evolución del episodio desde el Palau de la Generalitat.
Suscríbete para seguir leyendo