Panorama sombrío el que se cierne sobre los vehículos eléctricos. Al menos así lo cree Jim Farley, consejero delegado de Ford, quien espera que las políticas de Donald Trump reduzcan a la mitad este mercado en EEUU.
«No me sorprendería que las ventas de vehículos eléctricos en EEUU cayeran al 5%«, ha señalado durante una conferencia organizada por la compañía. El mercado de vehículos eléctricos será «mucho menor de lo que pensábamos».
En este sentido, el ejecutivo ha remarcado que las ventas de vehículos eléctricos caeran de una participación actual de mercado de alrededor del 10% hasta el 5%. «Creo que será una industria vibrante, pero será más pequeña, mucho más pequeña de lo que pensábamos, especialmente con el cambio de política sobre las emisiones del tubo de escape y la eliminación del incentivo de 7.500 dólares para el consumidor», ha añadido.
Y es que tras el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, la industria automotriz ha experimentado un giro de 180 grados con muchos fabricantes retrasando sus planes de producción de vehículos eléctricos y reorientando sus inversiones hacia coches con motor de combustión interna e híbridos.
Por ello, Farley ha señalado que la «electrificación parcial», como los híbridos, son más fáciles de aceptar por el momento para los clientes. Además, ha avanzado que Ford está buscando agregar producción híbrida a sus plantas de baterías y vehículos eléctricos.
«Tenemos que fabricar estos vehículos parcialmente eléctricos en las fábricas que habrían sido de vehículos eléctricos», ha dicho. «¿Qué hacemos con todas estas plantas de baterías? Las llenaremos, pero será más estresante» debido a los cambios de política de la administración Trump.
Cabe recordar que la unidad de vehículos eléctricos de Ford, el Model-e, perdió alrededor de 1.300 millones de dólares en el segundo trimestre y la compañía prevé pérdidas de hasta 5.500 millones de dólares en vehículos eléctricos este año.
