6.000 euros es el precio que le ha servido a Salvador F. para evitar la cárcel tras agredir sexualmente a una mujer que sí accedió a mantener relaciones con él, pero con una única condición: el uso de preservativo. Así consta en la sentencia que le impone dos años de cárcel a este varón, que este lunes por la mañana ha reconocido los hechos en la Audiencia Provincial de Zaragoza. Y como no tiene antecedentes se ha acordado la suspensión de la condena a cambio de que no delinca durante tres años y de que cumpla con la orden de alejamiento de 500 metros que le separará de la víctima a lo largo de los próximos cinco años.
Estos han sido los términos del acuerdo suscrito entre el ministerio fiscal, la acusación particular y la defensa ejercida por el abogado Eladio Mateo, una conformidad que también recoge el pago de una multa de 180 euros por las lesiones leves que le ocasionó a la víctima en el mes de diciembre de 2023. La sentencia, que ha sido dictada in voce por la presidenta del tribunal provincial adscrito a la Sección Primera, la magistrada Natividad Rapún, ya es firme al señalar las partes que no presentarán recurso de apelación ante la Sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA).
Inicialmente, Salvador F. afrontaba una pena de diez años de cárcel, pero en la sentencia se le ha aplicado la atenuante muy cualificada de reparación del daño. Y es que antes de la celebración del juicio había consignado 6.000 euros en las arcas del juzgado, precisamente, la indemnización que se solicitaba en favor de la denunciante, cuya abogada también ha dado el visto bueno a esta conformidad. Ambas acusaciones, tanto la pública como la particular, no se han opuesto a la suspensión de la condena.