El aplazamiento del Valencia-Oviedo trastoca los planes de uno y de otro equipo de manera inevitable. Los dos han tenido que cambiar su hoja de ruta ante el temporal que azota al territorio valenciano desde la noche del domingo. La posibilidad de suspensión sobrevoló por los alrededores de Mestalla, pero la demora del partido fue la decisión tomada por los organismos competentes a pesar de la tardanza.
El Oviedo viajó a València el domingo por la tarde a pesar de las señales de alerta emitidas por la AEMET. El equipo ovetense pudo entrenar a su llegada a la capital del Túria, pero, con vistas a la cita de mañana, no contará con un terreno de juego que le permita limar asperezas de cara al duelo que se llevará a cabo este martes a partir de las 20:00 en Mestalla.
El cuadro de Paunović se ejercitó ayer por la tarde en las instalaciones de la Ciudad Deportiva de Buñol gracias al permiso concedido por el Levante: “El Real Oviedo quiere agradecer al Levante UD la cesión de sus instalaciones para el desarrollo de la sesión, facilitando así el trabajo del equipo en la previa del encuentro en Mestalla”, comunicó el Oviedo en sus canales de comunicación.
Sin lugar para entrenar
Pese a ello, tal y como informó ‘La Nueva España’, el Oviedo entrenará en su hotel de concentración, el Melia Valencia, debido a que el Levante, según pudo saber Superdeporte, suspendiese cualquier actividad en la Ciudad Deportiva en la tarde-noche del domingo, sobre todo dirigido a los equipos de cantera. A su vez, el polideportivo de Nazaret, donde se entrenan las categorías inferiores del Levante Femenino, también quedó inhabilitado.