El satélite CryoSat de la Agencia Espacial Europea (ESA) ha descubierto 85 lagos sub glaciales bajo la Antártida. Este hallazgo aumenta el número total de lagos sub glaciales activos a 231, según la investigación publicada en ‘Nature Communications’.
Los investigadores han determinado que estas masas líquidas no son estáticas, puesto que se pueden llenar y drenar de forma periódica. Este movimiento podría modificar la estabilidad de la capa helada, un avance que ofrece una nueva mirada al sistema hidrológico.
Sally Willson, autora principal y doctora en la Universidad de Leed, explicó que «es increíblemente difícil observar eventos de llenado y vaciado de lagos subglaciales en estas condiciones, especialmente porque tardan varios meses o incluso en llenarse y vaciarse».
Según Willson, antes del estudio, «solo se habían observado 36 ciclos completos en todo el mundo, desde el inicio del llenado sub glacial hasta el final del vaciado. Observamos 12 eventos más de llenado y vaciado completos, lo que eleva el total a 48».
El satélite CryoSat utilizado para la investigación fue lanzado como parte del programa FutureEO de la ESA en 2010. El dispositivo cuenta con un altímetro rada que detecta variaciones mínimas en la altura de la superficie del hielo. Además, también puede medir la altura del mar.
Durante una década (2010-2020), el satélite recopiló datos que ayudaron a los investigadores a detectar cambios localizados en la altura de la superficie de la Antártida. Con esta información, se puedo realizar una cartografía más precisa y seguir su evolución.
Anna Hogg, coautora de la investigación y profesora de la Universidad de Leed, subrayó la dinámica de estos sistemas: «Fue fascinante descubrir que las áreas de los lagos subglaciales pueden cambiar durante diferentes ciclos de llenado o vaciado».
Según Hogg, este cambio «demuestra que la hidrología sub glacial antártica es mucho más dinámica de lo que se creía, por lo que debemos seguir monitoreando estos lagos a medida que evolucionan en el futuro».