La radiografía más actualizada del motorista español llega de la mano de un estudio presentado conjuntamente por Anesdor y motos.net, que recoge las respuestas de más de 2.000 conductores. Realizado en plena transformación de la movilidad urbana, el informe desgrana las motivaciones, preferencias y barreras de los usuarios de moto en nuestro país, abordando desde la intención de compra hasta la percepción de seguridad vial o el impacto de la electrificación.
Perfil del motorista: madurez, rutina y ocio como prioridad
El conductor medio de moto en 2025 tiene 50 años, posee carnet B y A, y recorre casi 6.000 km anuales. El 95% de los encuestados conduce moto y el 93% tiene una en casa. Aunque un 39% la utiliza a diario, el principal motivo no es laboral: el 49% declara que su uso está relacionado con el ocio o el turismo. El trabajo queda en segundo plano (41%).
El conductor medio de moto en 2025 tiene 50 años, posee carnet B y A, y recorre casi 6.000 km anuales / Archivo
Tipos de moto: la carretera manda
La moto de carretera sigue siendo la preferida por un amplio margen: el 70% se decanta por ella, y un 49% opta por cilindradas superiores a 750 cc. Los escúteres alcanzan un 22% y las motos off-road un 8%. Más de la mitad de los motoristas se mueven indistintamente entre ciudad y carretera, con Madrid y Barcelona como los principales núcleos urbanos.
Movilidad diaria: trayectos cortos, pero constantes
El trayecto medio diario en moto es de 40 minutos y cubre unos 16 kilómetros. Un 35% realiza recorridos con varias paradas, y un 60% hace trayectos circulares de ida y vuelta. La moto sigue siendo una solución ágil para la movilidad urbana, aunque su papel como herramienta de ocio parece ganar terreno.

La moto de carretera sigue siendo la preferida por un amplio margen / Archivo
Moto eléctrica: falta información sobre las ayudas
Solo el 1% de los encuestados posee una moto eléctrica. Aunque el 77% cree que su uso sería más viable en ciudad, las barreras persisten: incompatibilidad de puntos de recarga, mal funcionamiento y, sobre todo, desconocimiento. Solo el 23% conoce las ayudas disponibles, y apenas un 6% ha solicitado alguna. Más del 50% seguiría sin interesarse por una moto eléctrica incluso con incentivos.
Compra online: interés moderado, confianza limitada
La digitalización avanza, pero no convence del todo: el 70% consulta información en Internet antes de comprar, pero solo el 36% se plantea hacerlo todo online. La necesidad de probar la moto antes de comprarla y la falta de confianza frenan este canal de venta.

Solo el 1% de los encuestados posee una moto eléctrica / Archivo
Cambio de moto: intención moderada, preferencia por la combustión
Un 43% planea comprar una moto en los próximos 12 meses. Los motivos: tecnología, diseño y potencia. El 39% se inclina por una moto nueva, el 35% por una de ocasión. El presupuesto medio para una nueva es de 11.064 euros; para una usada, 4.668. El 97% quiere una moto de combustión. Solo el 3% contempla una eléctrica.
Venta de la moto actual: renovación del parque
Entre quienes quieren comprar, un 71% también pretende vender su moto actual. La antigüedad media es de 8,5 años. Un 38% cree que su vehículo debería acogerse a un plan de achatarramiento.

El 39% de los encuestados se inclina por una moto nueva, el 35% por una de ocasión / Archivo
Mototurismo: ocio sobre dos ruedas
El 64% de los motoristas practica mototurismo, sobre todo en el ámbito nacional. El 99% organiza sus viajes por cuenta propia y el presupuesto medio para estas escapadas es de 170 euros. La moto como herramienta de desconexión y disfrute está más vigente que nunca.
Seguridad vial: el cruce, lo más temido
El 46% considera que la maniobra más peligrosa es aproximarse a un cruce. Le siguen el adelantamiento y el trazado de curvas. Los otros vehículos, el mal estado del asfalto y las infraestructuras deficientes —como los guardarraíles sin protección— generan gran preocupación. Solo el 15% considera adecuado el mantenimiento actual de la vía.

El 64% de los motoristas practica mototurismo / Archivo
Ciudad y circulación: el arcén como aliado en los atascos
El 78% utiliza el arcén en situaciones de atasco, aunque un 19% no lo hace por ser ilegal. El 95% apoyaría su regulación a baja velocidad, y un 88% valora positivamente la creación de carriles exclusivos para motos. El carril bus y las zonas de parada avanzada en semáforos también son bien recibidas.
Aparcamiento: muchas motos, pocas plazas
Aunque el 76% encuentra plazas exclusivas en calzada, un 33% no puede usarlas por estar ocupadas. Un 35% aparca directamente en la acera. Solo un 27% estaría dispuesto a pagar por aparcar la moto. La mayoría conoce la normativa de su ciudad al respecto, aunque la regulación varía entre municipios.

El 78% utiliza el arcén en situaciones de atasco, aunque un 19% no lo hace por ser ilegal / Archivo
Formación y ayudas a la conducción: conciencia creciente
Un 71% está dispuesto a realizar cursos post-carnet, pero solo el 27% conoce la oferta existente. El 72% sabe qué sistemas de asistencia electrónica equipa su moto y valora mucho su utilidad. La formación continua y las ayudas electrónicas empiezan a consolidarse como elementos esenciales.
Equipamiento: guantes sí, airbag todavía no
El 91% usa guantes tanto en ciudad como en carretera. El airbag para motoristas es conocido por el 82%, pero solo una minoría lo utiliza. Su precio, principal freno: la media dispuesta a pagar se sitúa en 235 euros. El interés crece, pero aún no despega.

Un 71% está dispuesto a realizar cursos post-carnet, pero solo el 27% conoce la oferta existente / Archivo
Quienes no conducen moto: precio y seguridad, principales barreras
Entre los que no usan moto, los principales motivos son el coste, la vida familiar y el miedo a los accidentes. El coche sigue siendo el medio de transporte urbano más usado (72%). Sin embargo, los servicios como el motosharing, el alquiler o el renting van ganando peso, con un 52% dispuesto a usarlos.
Conclusión: un motorista activo, realista y con voz
El informe pinta un retrato claro del motorista español: maduro, activo y fiel a la combustión. Demanda infraestructuras seguras, normativa clara y opciones formativas accesibles. La electrificación todavía genera desconfianza, pero hay espacio para avanzar si se abordan las barreras reales. La moto no es solo un medio de transporte: es también una forma de vida.