En una playa del norte de Jutlandia Septentrional te puedes encontrar muchas cosas, además de olas y arena. Durante estos días, toparse de repente con el Leapmotor B10 es una de ellas. Como miembros del jurado europeo de The Car Of The Year hemos podido probar en exclusiva durante esta semana en el Tannistest 2025 el nuevo SUV del segmento B que la marca de Hangzhou (China) del Grupo Stellantis fabricará en España, seguramente en Zaragoza.
El modelo ofrece una estética peculiar, muy redondeada, con detalles impropios de coches típicamente chinos. Pocos cromados, aunque eso sí, mucha tecnología. La marca ha querido mostrar unas líneas suaves, nada estridentes, que puedan envolver un gran espacio interior. En un coche de 4,51 metros de largo todo es posible, aunque muchos competidores no consiguen ofrecer la comodidad y facilidad de acceso a las plazas traseras del B10.
Gran espacio
El Leapmotor B10 dispone de un capó de suaves trazos y destacan en el frontal los faros Wing Star, full LED y con luz de carretera automática. Mide 4,51 metros de largo, 1,87 de ancho y 1,65 metros de alto. La capacidad del maletero es de 515 litros, pero puede ampliarse, con los asientos traseros abatidos, hasta los 1.415. Además, bajó el capó hay 25 litros extra.
Leapmotor B10 / Xavier Pérez

Leapmotor B10 / Xavier Pérez
Toda esta propuesta recibe una plataforma propia de la marca (no es de Stellantis) que permite una distancia entre ejes de 2,75 metros, lo que redunda en un muy buen espacio interior, bien aprovechado, especialmente como decía en los asientos posteriores. Cómodos y con distancia suficiente para rodillas y cabeza incluso para personas de 1,90 metros de alto. Todo ello mantiendo un puesto de conducción en la posición para una persona de esta talla. Leapmotor se jacta de haber conseguido un aprovechamiento del espacio interior del del 87,4%. Doy fe. Conclusión: Excelente.

Leapmotor B10 / Xavier Pérez
Si seguimos adentrándonos en la atmósfera del Leapmotor B10, encontraremos un salpicadero exento de detalles suérfluos, en el que destaca una gran pantalla central de 14,6 pulgadas desde la que se pueden manejar casi todas las funciones tecnológicas importantes del vehículo, salvo una, el conductor, la más esencial.
Esta pantalla responde al clásico de las pantallas de modelos chinos: los reflejos. La visibilidad de la misma es buena desde la posición de conducción, pero refleja cantidad de elementos y destellos en muchas ocasiones. También será cosa del software, muy chino, que ofrece visualización de siluetas de edificios urbanos mientras circulamos por los frondosos bosques daneses. Curioso.

Leapmotor B10 / Xavier Pérez
Existe otra pantalla frente al conductor de LCD y 8.8 pulgadas con los datos necesarios para el manejo. Tal vez sobra el cochecito en la parte central que te va indicando las líneas de la carretera, como en un videjuego, también muy propio de marcas chinas y no tan chinas (últimamente). Yo preferiría velocíometro grande y menos detalles supérfluos.

Leapmotor B10 / Xavier Pérez

Leapmotor B10 / Xavier Pérez
En ese sentido, siento discrepar con algunas las famosas ADAS (tiene 17). Taladran el cerebro no sabes de qué manera. Hay un pequeño visor en el marco del parabrisas que ‘espía’ todos los movimientos de los ojos. Así que mucho cuidado con pestañear porque te pita penalti y expulsión. Me planteé incluso taparlo con un trozo de cinta para poder disfrutar de la conducción. Los sensores de mantenimiento de carril son precisos y las correcciones no son intrusivas. Buen tanto.
El puesto de conducción es cómodo y el tacto de un volante más bien pequeño pero sin hacer locuras me ha parecido una buena elección. Buena dirección y perfecta visibilidad. En un coche con tanto espacio se agradece ese tacto al tomar las curvas (aunque en la zona de Tversted no es que haya muchas).
Motor afinado
La parte motriz también me ha parecido interesante. Leapmotor nos propone en este test exclusivo solo el motor de 218 CV que se alimenta de la energía de una batería de 67,1 kWh. Su consumo en la prueba osciló entre los 13 y los 15 kWh cada 100 kilómetros y por los datos que pudimos cotejar, con el 40% de la capacidad de la batería se pueden cubrir cerca de 190 kilómetros. Eso supone que la autonomía prometida por la marca de 434 kilómetros es más que posible con un manejo adecuado. Leapmotor dispone de una versión de menor rango de batería con 56,2 kWh con una promesa de autonomía de 361 kilómetros.

Leapmotor B10 / Xavier Pérez
Las suspensiones son muy compensadas, bastante firmes si consideramos que es una propuesta que viene de China, aunque desde Leapmotor nos confirman la idea de ajustar más para Europa su modelo, algo esencial en la producción que se va a llegar a cabo en España. Técnicamente es posible. No obstante absorbe bien, nada que objetar. El sonido que se percibe en el interior no es parecido al de un tranvía, por suerte, algo que sucede en muchos.
Precio muy interesante
El secreto del modelo para fijar el precio de 20.000 euros (con promociones, aunque en China su precio es de unos 13.000 euros al cambio) es que produce el 65% de sus componentes en casa, en Leapmotor, lo que le permite atacar los precios de una forma interesante, sin depender de problemas con los proveedores globales. Este será uno de los puntos clave para su producción en España, donde los proveedores locales jugarán un papel esencial. El precio de venta real es de 27.300 euros.

Leapmotor B10 / Xavier Pérez
Está disponible con dos acabados. Life: Llantas de aleación de 18 pulgadas, cámara de aparcamiento de 360 grados, techo panorámico de cristal de 18 metros cuadrados con parasol eléctrico, 17 funciones ADAS. Y el acabado Design: suma iluminación ambiental, asientos delanteros eléctricos con calefacción y climatización, tapicería de cuero ecológico. Además, a partir de diciembre, contarán con compatibilidad con Appel CarPlay y Android Auto.