General Dynamics European Land-Santa Bárbara (GDELS-SBS) ha entregado al Ejército de Tierra los primeros carros de combate Leopard 2E que han completado un mantenimiento integral en el centro de excelencia de apoyo al ciclo de vida de Alcalá de Guadaíra (Sevilla). La aceptación por parte de las Fuerzas Armadas marca un hito en la sostenibilidad de la flota acorazada y abre la puerta a su futura modernización.
La multinacional estadounidense se adjudicó el diciembre de 2023 el acuerdo marco para el mantenimiento de los tanques de la familia Leopard del Ejército español por un importe de 126 millones de euros (impuestos incluidos), según figura en el portal de contratación del Estado. El contrato público se divide en dos lotes, uno de 105 millones de euros ligado al mantenimiento preventivo y correctivo, así como al suministro de repuestos, para los vehículos de combate de la familia Leopardo 2E, mientras que el otro, de 21 millones de euros, está vinculado a los de la vertiente Leopard 2A4.
El programa, desarrollado durante el último año por la filial española de General Dynamics, ha exigido reactivar la cadena de suministro y superar complejos retos de obsolescencia. Ingenieros, técnicos y especialistas de la compañía han trabajado en coordinación con el Parque y Centro de Mantenimiento de Sistemas Acorazados nº 2 (PCMASA) y con las unidades usuarias, demostrando la capacidad de la industria nacional para asumir proyectos de alta complejidad técnica.
Según GDELS-SBS, este logro refuerza el papel de su centro en Alcalá como polo de excelencia industrial y tecnológica, y garantiza la plena operatividad de los Leopard 2E durante al menos la próxima década.
Modernización en marcha
El Ejército cuenta ahora mismo con 239 unidades Leopard 2E, distribuidas en 219 carros de línea, 16 vehículos de recuperación y 4 de instrucción. A ello se suman más de un centenar de la versión anterior que es el Leopard 2A4, en gran parte almacenados o destinados a formación.
El Leopard 2E constituye la columna vertebral de las brigadas acorazadas españolas y ha tenido presencia en operaciones internacionales, como la misión de la OTAN en Letonia.
El objetivo del Ministerio de Defensa es impulsar un programa de modernización de los tanques que se extenderá durante la próxima década. Este plan, dividido en diferentes fases, prevé la sustitución de sistemas obsoletos, mejoras en software, blindaje adicional, cañones de nueva generación y estaciones de armas controladas a distancia. El plan del departamento de Margarita Robles es actualizar parte de la flota al estándar “2E M2+”, con capacidades cercanas a las versiones más avanzadas de Europa, como el Leopard 2A7.
Una pieza clave para la defensa de España
El Leopard 2E es una versión adaptada del Leopard 2A6 alemán, fabricada bajo licencia en España por Santa Bárbara Sistemas, que lo adquirió en 2003 como parte del programa de modernización de armamento llamado Programa Coraza. Con una tripulación de cuatro hombres, un peso cercano a las 62 toneladas, una velocidad máxima de 70 km/h y un cañón de 120 mm L/55, se encuentra entre los carros más potentes y veloces de la OTAN.
Diseñado para resistir los entornos de combate más exigentes, combina potencia de fuego, protección, movilidad y capacidad de integración con sistemas de mando y control. Su autonomía alcanza los 350 kilómetros, lo que le otorga una notable capacidad de despliegue en operaciones de maniobra.
La modernización prevista permitirá que, al menos hasta 2035, España mantenga una capacidad acorazada de primer nivel, adaptada a los retos de la guerra moderna y alineada con sus compromisos internacionales.