Un encuentro histórico. Así se puede calificar la primera edición de la Social Economy European Summit, la cumbre europea de la Economía Social que se celebró del 15 al 19 de septiembre en Murcia en el marco de la Capitalidad Española de la Economía Social 2025. «Es algo histórico para el sector, un hito porque es el primer encuentro de esta magnitud celebrado en Europa. Y ha sido todo un éxito», resalta Juan Antonio Pedreño, presidente de Social Economy Europe (SEE), organizadora del evento junto a Ucomur.
Una cita que congregó a más de 650 personas, 100 ponentes internacionales, representantes de 200 organizaciones de Economía Social, delegaciones de Gobiernos de 27 países europeos y del Mediterráneo Sur al más alto nivel político y de las instituciones comunitarias.
Juan Antonio Pedreño, presidente de SEE, durante el cierre de la cumbre.

Pedreño, durante su participación junto a Maravillas Abadía. / Ucomur
Entre ellas, la vicepresidenta ejecutiva de Derechos Sociales y Capacidades, Empleo de Calidad y Preparación de la Comisión Europea, Roxana Mînzatu; la vicepresidenta segunda del Gobierno de España y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, junto a ministros de trabajo de diferentes países europeos como de Bulgaria, Chipre, Francia, Polonia y Rumanía. Asimismo, se contó con Fernando López Miras, presidente de la Región de Murcia y vicepresidente del Comité Europeo de las Regiones; José Ballesta, alcalde de Murcia; Maravillas Abadía, copresidenta del Intergrupo de Economía Social del Parlamento Europeo; y Amparo Merino, secretaria de Estado de Economía Social, entre otras autoridades.
Los ejes principales sobre los que se articuló la cumbre, celebrada en el auditorio Víctor Villegas, fueron garantizar la plena ejecución del Plan de Acción Europeo de Economía Social y situar este modelo empresarial en el nuevo Marco Financiero Plurianual de la UE hasta 2034.

La participación del público fue un aspecto importante de este encuentro. / Ucomur
La comisión europea, comprometida
La vicepresidenta responsable de políticas de empleo de la Comisión Europea, Roxana Mînzatu, reafirmó durante su intervención los compromisos clave para reforzar la Economía Social y reconoció su valor estratégico para la cohesión y la resiliencia de toda Europa, «una parte esencial del mercado único y no como un actor periférico». La comisaria lanzó un mensaje contundente a raíz de la preocupación del sector por los cambios organizativos en la Comisión: «Tienen mi total compromiso de que trabajaré con ustedes para seguir impulsando las ambiciones de la Economía Social».
Mînzatu desgranó algunas de las principales áreas de trabajo en las que va a concentrar su actuación en materia de Economía Social desde el refuerzo del Plan de Acción con nuevas medidas; asegurar que la Economía Social gane peso en la contratación pública y en la normativa comunitaria sobre las ayudas de Estado; así como arbitrar mecanismos para mejorar el acceso a la financiación de este modelo empresarial.

Roxana Mînzatu, vicepresidenta ejecutiva de Derechos Sociales y Capacidades, Empleo de Calidad y Preparación de la Comisión Europea. / Ucomur
Finalmente, Mînzatu concluyó afirmando que el conjunto de la Economía Social «necesita ser mucho más grande de lo que es ahora» para alcanzar la resiliencia y el valor político que merece. Se posicionó como una aliada de este modelo empresarial y agradeció la invitación, esperando trabajar intensamente en el próximo año en las políticas mencionadas.
Pedreño calificó muy positivamente los debates de la Cumbre. «Este acto evidencia el férreo compromiso de todas las instituciones y gobiernos presentes y el consenso sobre el papel de la Economía Social como solución a los retos actuales y para la autonomía estratégica de Europa», resaltó. Además, demandó la necesidad de que el próximo marco financiero plurianual priorice recursos para el sector e hizo un llamamiento para que, bajo el liderazgo de la Comisión, la Economía Social se sitúe en el centro de todas las estrategias europeas. También hizo hincapié en la necesidad de que exista una estructura departamental responsable de la Economía Social en la Comisión Europea.
Liderazgo de España
Por su parte, Yolanda Díaz, vicepresidenta Segunda y ministra de Trabajo y Economía Social de España, destacó el liderazgo de España y la necesidad de que la Economía Social desempeñe un papel protagonista en las transformaciones del modelo productivo español y europeo. Díaz reclamó que la Economía Social se sitúe «en el corazón de las políticas públicas europeas».

Yolanda Díaz, vicepresidenta del Gobierno de España y ministra de Trabajo y Economía Social, en una de sus intervenciones en la cumbre. / Ucomur
Enumeró cambios normativos cruciales como la reforma del reglamento de exención por categorías, la eliminación de restricciones en las ayudas de Estado y la mejora de la contratación pública, donde España aumentará la reserva de contratos del 10% al 15%. Díaz concluyó que «no hay Europa social sin la Economía Social en el centro», y que este modelo es una alternativa estructural basada en la solidaridad, la democracia y la prosperidad compartida.
La Región de Murcia, a la cabeza
Fernando López Miras, presidente de la Región de Murcia y vicepresidente del Comité Europeo de las Regiones, indicó que la Economía Social supone un modelo económico que «antepone las personas» a la «lógica exclusiva del beneficio inmediato», por lo que su Gobierno ha desplegado una hoja de ruta para fortalecerla. Y ello ha llevado a que la región cuente con más de 2.500 empresas de economía social, 100.000 empleos y a que el territorio lidere la creación de cooperativas por habitantes en España. Recordó que, en los últimos 10 años, se han construido más de 1.700 empresas de Economía Social.

Fernando López Miras, presidente de la Región de Murcia, a su llegada a la cumbre. / Ucomur
«Este dinamismo viene a confirmar que estamos ante un modelo plural, resiliente y capaz de generar oportunidades en los momentos de mayor incertidumbre. Desde la Región de Murcia queremos seguir sumando y liderando la Europa de mañana que debe sostenerse bajo los principios de la Economía Social», manifestó Fernando López Miras.
El Parlamento Europeo, presente
La voz del Parlamento Europeo recayó en los copresidentes del Intergrupo de Economía Social y Servicios de Interés General que participaron en una audiencia centrada en los diferentes ejes sobre los que se articuló la Cumbre. En este sentido, su copresidenta Maravillas Abadía destacó que «ya nadie duda de que la Economía Social sea un actor principal en Europa, es un motor de empleo que representa más de 4’3 millones de entidades y 11’5 millones de empleos directos, lo que equivale al 6’3% de la población ocupada en Europa y una facturación por encima del billón de euros».
«Hay que potenciar la financiación y destacarla como prioridad de cara al marco financiero plurianual. La Economía Social no puede verse como un instrumento tiene que verse como una palanca estratégica del futuro de la UE», remarcó Abadía.

La cumbre contó con representantes de 200 organizaciones de Economía Social.
Otro de los hitos destacables de esta cumbre ha sido la reactivación del Comité de Monitoreo de la declaración de Luxemburgo, que reunió a representantes gubernamentales de Bélgica, Bulgaria, Eslovaquia, Eslovenia, España, Francia, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Polonia y República Checa. El encuentro reafirmó el compromiso de todos los países en la defensa y promoción de la Economía Social.
Un paso más
«Hay que dar un paso más, hay que garantizar la implementación del Plan de Acción en todos los Estados; adaptarlo al nuevo contexto internacional y dotarlo de más ambición en sus medidas. Necesitamos marcos legales claros, reforzar las medidas que están siendo eficaces y seguir adoptando políticas públicas que reconozcan nuestras especificidades en los Estados y en nuestros territorios», incidió Pedreño.
Asimismo, el presidente de SEE reclamó la necesidad de reforzar la contratación pública y el Fondo Social Europeo (FSE+). «No pedimos privilegios, pedimos coherencia: que los fondos europeos se canalicen hacia modelos empresariales que conjugan competitividad y solidaridad, que generan empleo estable y que, a diferencia de otros, nunca se deslocalizan», señaló.

Recepción en el Ayuntamiento de Murcia a cargo del alcalde José Ballesta.