Revés judicial para Donald Trump. El Tribunal de Distrito de Estados Unidos para el Distrito de Columbia ha concedido a Ørsted la medida cautelar solicitada para reanudar la construcción del parque eólico marino paralizado por el Gobierno del país norteamericano.
La compañía danesa ha explicado que esta decisión «permite a Revolution Wind reanudar las actividades afectadas mientras se tramita la demanda que impugna dicha orden«. En este sentido, ha dejado claro que Revolution Wind seguirá trabajando en colaboración con la administración estadounisense y otras partes interesadas «para lograr una pronta resolución».
De este modo, Revolution Wind reanudará las obras de construcción afectadas «lo antes posible, priorizando la seguridad».
Cabe recordar que fue a principios de septiembre cuando Ørsted presentó una demanda contra el Gobierno de EEUU para evitar el cierre de su parque eólico marino en Nueva Inglaterra.
Esto, después de que a finales de agosto, la administración Trump ordenase a la compañía detener la construcción de un proyecto casi terminado para «abordar las preocupaciones relacionadas con la protección de los intereses de seguridad nacional».
En concreto, el pasado 22 de agosto, Revolution Wind, propiedad al 50% con Skyborn Renewables, una subsidiaria de Blackrock, recibió la orden de paralización por parte de la Oficina de Administración de Energía Oceánica del Departamento del Interior de Estados Unidos (BOEM, por sus siglas en inglés).
La construcción está actualmente al 80% y la inversión requerida para completarla asciende a aproximadamente 5.000 millones de coronas danesas por la participación del 50% de Ørsted en el proyecto. Una vez completado, se espera una contribución anual de Revolution Wind al EBITDA de aproximadamente 1.000 millones de coronas danesas.