Su especialización era introducir cargamentos de cocaína y de hachís en Canarias a través del mar. Y esa habilidad le llevó a convertirse en uno de los grandes capos del Archipiélago. Tal fue su ascenso —presuntamente— debido a sus turbios negocios que cambió su barrio de Schamann, El Buque de Guerra, uno de los más conflictivos de Las Palmas de Gran Canaria y que ha dado pie a su apodo, por una villa de lujo en el sur de la Isla.
La vida de José Ramón A. C., alias ‘El del Buque’ y de 39 años, al margen de la ley era un secreto a voces para conocidos y autoridades. Tanto, que en marzo su mujer y su hijo fueron víctimas de un secuestro en un caso que se investigó como un ajuste de cuentas por los quehaceres de ‘El del Buque’, a quien sus rivales acusaban de robar media tonelada de cocaína por la que le pedían 12 millones de euros. El dinero o la familia.
Tras años de investigaciones y de pesquisas frustradas por la capacidad esquiva de ‘El del Buque’ esta semana él ha caído —se ha entregado— y su banda ha sido desmantelada. Las autoridades lo consideran el líder de una de las redes de narcotráfico más activas de España, banda que durante todos estos años —hasta la captura de su familia— dirigía desde el sur de Gran Canaria y que funcionaba con una estructura jerárquica, con conexiones familiares o de amistad entre los miembros.
La ‘operación Lazos de Sangre’, precisamente, como se ha denominado, se ejecutó de forma conjunta por la Policía Nacional y la Guardia Civil —con la colaboración de la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria— y ha concluido con la detención de 17 personas —al menos seis en prisión, entre ellas el cabecilla—, la ejecución de 23 entradas y registros en Gran Canaria, La Gomera y Fuerteventura y la intervención de 14 inmuebles, 38 automóviles y 24 embarcaciones.
«El cabecilla del grupo criminal, ‘El del Buque’, era uno de los objetivos prioritarios para las policías europeas, un objetivo de alto valor, y está considerado como uno de los mayores narcotraficantes del Archipiélago», sostienen los investigadores al mando de ‘Lazos de Sangre’. Los contactos de ‘El del Buque’ —exluchador de MMA—no se limitan a Canarias, sino que abarcan la Península, países de Europa e incluso Sudamérica, de donde traían los alijos de cocaína.
«La detención de ‘El del Buque’ supone el culmen de una investigación de más de un año, que ha permitido desarticular por completo la estructura criminal, con la detención de todos sus miembros por tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal», especifican la Policía Nacional y la Guardia Civil. Esa desarticulación ha sido posible gracias a que el lunes por la tarde el cabecilla y otro de sus compinches, Raúl E. Q., se entregaron en la Jefatura Superior de Policía de Canarias, conscientes de que su arresto era inminente.
La banda estaba especializada en la introducción de grandes cantidades de cocaína en España a través de embarcaciones. En esos barcos utilizaban sofisticados sistemas para ocultar la droga. «En cada operación había alijos de varias toneladas«, añaden. Varias toneladas. Casualmente, los autores del secuestro de su mujer e hijo el 12 de marzo —liberados 48 horas más tarde en buen estado, tras un pago de 300.000 euros en criptomonedas— lo acusaban de robar 502 kilogramos de cocaína de un cargamento de dos toneladas que llegó al Puerto de Las Palmas y que se ocultó en La Isleta. Él negó estar detrás del vuelco (robo, en el argot policial) pero admitió que conocía la sustracción del estupefaciente.
Droga por la borda
Durante la investigación, en dos persecuciones a tripulantes de la banda por alta mar, las autoridades intervinieron cien kilos de cocaína y otros tantos de hachís. Una de ellas se realizó en noviembre de 2024 y los pilotos —que en ese momento huyeron— llegaron a tirar la mayoría del cargamento por la borda. Solo quedaron esos cien kilos en el barco, prueba suficiente para implicar ahora a ‘El del Buque’.
En los registros, realizados el martes, solo medio día después de su entrega voluntaria, los agentes incautaron grandes sumas de dinero —que han quedado a disposición de la Audiencia Nacional, órgano que coordina la investigación—, material informático y documentación que están siendo investigados.
La ‘operación Lazos de Sangre’, impulsada por la Fiscalía Especial Antidroga, ha contado con el apoyo de la NCA (National Crime Agency de Reino Unido), la DEA (Drug Enforcement Administration de Estados Unidos), Europol, el MAOC-N (Centro de Análisis y Operaciones Marítimas en materia de Narcotráfico) y el Citco (Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado). La implicación de los organismos internacionales fue esencial para rastrear los movimientos de la organización e interceptar sus comunicaciones, algunas de ellas encriptadas.
Tras las detenciones, ocho de los acusados pasaron este jueves a disposición judicial. Uno de ellos quedó en libertad sin fianza; otro bajo fianza de 25.000 euros que ya ha abonado y, por tanto, que le ha permitido salir a la calle, y el resto han ingresado en prisión provisional. ‘El del Buque’ duerme ya tras las rejas. En el momento de escribir este artículo, se desconocía la situación procesal de los otros nueve arrestados, que declararon este viernes ante el juez de la Audiencia Nacional por videoconferencia desde Canarias. La operación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones.