Hacía solo quince minutos que el empleado de una carnicería de Tamaraceite, en Las Palmas de Gran Canaria, había subido la verja de acceso y encendido las luces del local para comenzar su jornada laboral. Eran las 8.15 horas de este jueves, y la primera persona que cruzó la puerta no fue un cliente habitual sino un ladrón que, arma blanca en mano, lo amenazó hasta que robó la báscula del local. En su huida, olvidó llevar consigo el cuchillo empleado en el atraco. La Policía Nacional ha abierto ya una investigación para detenerlo.
El robo ocurrió a primera hora de la mañana en un establecimiento de la calle San Borondón. El ladrón, con la cabeza cubierta por una capucha y portando un cuchillo, accedió al local y amenazó a un trabajador hasta que logró llevase una de las pesas. Todavía se desconoce si ese era el botín que estaba buscando, pero lo cierto es que tras hacerse con la báscula se fue de la carnicería.
En ese momento, olvidó volver a coger el cuchillo con el que había amenazado al dependiente y que tiró al suelo para poder cargar la báscula.
Los testigos de este robo con violencia dieron la voz de alarma a la Policía Nacional, que se desplazó hasta el negocio. Allí, los agentes recogieron el arma blanca utilizada por el delincuente que, según los primeros datos, no llevaba guantes. Los agentes analizan ya las huellas del cuchillo, así como cámaras de seguridad, para poder localizar y detener al autor del robo.