Las derrotas de Jessica Bouzas ante Marta Kostyuk (7-6 (3) y 6-2), primero, y la de Paula Badosa ante Elina Svitolina (5-7, 6-2 y 7-5), después, acabaron con las ilusiones del equipo español en su andadura en las finales de la Copa Billie Jean King. Sin poder sumar una victoria en los dos duelos individuales, España se despidió por la vía rápida ante el equipo ucraniano, que impuso el ritmo en los momentos vitales de cada partido.
Era el regreso de Badosa desde su lesión en el psoas en Wimbledon y la versión mostrada no fue para nada reprochable. Le valió para apuntarse un batallado primer set, pero la inactividad le acabó pasando factura en las piernas ante una Svitolina siempre viva y correosa en la pista.
Le costó afianzar su servicio a partir del segundo set y sus oportunidades se fueron desvaneciendo junto con la presencia del equipo español, que había sufrido el primer golpe con la derrota de Jessica Bouzas ante Marta Kostyuk.
En un guion muy parecido al de Badosa, la tenista ucraniana supo aguantar la embestida inicial español para acabar llevando el partido a su terreno, ante una Bouzas que fue de más a menos. En su caso, no pudo llevarse un primer set muy peleado que se decidió en el tie break, y acabó cediendo en el segundo de manera contundente.
España se despide así del sueño de conquistar su sexta corona ante una Ucrania que se medirá en semifinales a la actual campeona, Italia.
Por el otro lado del cuadro, este jueves será el turno de los otros dos duelos de cuartos de final, que enfrentaran a Kazajistán y Estados Unidos en el primer turno y a Japón y Gran Bretaña en el segundo.