Está siendo un inicio de temporada algo ajetreado para André Almeida. El centrocampista portugués fue uno de los nombres propios del final de mercado por su posible salida del club, aunque finalmente se quedó después de que ninguna oferta satisficiera las exigencias del Valencia. El comienzo de Liga no ha sido precisamente sencillo debido a algún problema físico, aunque no demasiado grave, y ahora, tras haber disputado únicamente 24 minutos en las primeras cuatro jornadas, Almeida ha alcanzado un acuerdo con el Valencia CF para renovar su contrato hasta el 30 de junio de 2029.
Una ampliación de contrato de cuatro años no deja de ser una apuesta por parte de la entidad de Mestalla, que además mejora sus condiciones salariales para pasar a engrosar en la clase media de la plantilla en términos económicos. Ahora, con la continuidad en el club asegurada, es turno de que André Almeida responda dando un paso al frente sobre el terreno de juego, sacando a relucir la calidad que atesora y, sobre todo, haciéndolo con regularidad para que se convierta en un futbolista diferencial en el centro del campo. Cabe recordar que el Valencia hizo una firme apuesta por él desembolsando en 2022 alrededor de ocho millones de euros al Vitoria Guimaraes.
El portugués André Almeida ha vuelto a ejercitarse con el equipo / SD
Tres años de pura irregularidad
Las tres temporadas que ya atesora André Almeida vistiendo la camiseta del Valencia, cuatro contando la actual, no han sido al cien por cien como al futbolista le hubiera gustado. El luso ha alternado tramos de mucha importancia dentro del equipo con otros en los que su papel ha sido más residual, empujado por un rendimiento sobre el terreno de juego que no estaba siendo el esperado.
En su primera temporada, con Genaro Gattuso en el banquillo del Valencia, tardó poco en hacerse con la titularidad y completó un inicio de curso bastante ilusionante. En aquel fatídico tramo final en el que el equipo rozó el descenso, André mantuvo su sitio en el once pero su rendimiento cayó levemente. En la 2023/24 le ocurrió al contrario: comenzó la temporada lejos del nivel que se le había visto y una lesión muscular le mantuvo lejos del verde durante varias semanas. Regresó en el tramo final y lo hizo con un rendimiento que volvió a ilusionar.
Importante para Corberán
La pasada campaña demostró la misma irregularidad, aunque fue uno de los grandes beneficiados de la llegada de Carlos Corberán al banquillo del Valencia. Con el de Cheste ganó importancia en el once titular y desplegó su mejor fútbol de la temporada. De hecho, las cuatro asistencias con las que terminó la temporada fueron todas en ese segundo tramo.
Y con Corberán también en el cargo esta temporada es el momento para que Almeida se destape, coja galones en un centro del campo que por momentos parece desgobernado y responda con fútbol a su renovación. El primer paso pasa por volver al campo después de haberse quedado sin minutos en los últimos tres compromisos ligueros. Algunos de los últimos onces de Corberán no han funcionado como al técnico le hubiera gustado y podría ser momento para que Almeida, que sigue cogiendo ritmo tras unas molestias, coja el timón del equipo.
Su continuidad no estuvo clara
SUPER publicó el pasado 21 de agosto que la situación no se enquistaría, y que con ese objetivo las dos partes trabajarían en los primeros días posteriores al mercado si antes no se concretaba ningún traspaso que satisfaciese a todos. Venta o renovación en septiembre, una información que ahora se confirma con el acuerdo alcanzado.
En plan inicial durante el verano pasó por un traspaso que colmara económicamente al Valencia para poder lanzarse al mercado en busca de un recambio. Las opciones, importantes como la de Cameron Puertas, estaban elegidas, pero no se activaron definitivamente porque el principal interesado en Almeida, el Trabzonspor no dio garantías de pago. Ni tampoco cotentó al Valencia con el fijo principal de su oferta por André. Asimismo, más allá de lo salarial, el destino turco no convencía plenamente al luso.