Jeff Gray, el fiscal del condado de Utah, pedirá la pena de muerte contra Tyler Robinson, sospechoso de asesinar al activista de pro-Trump Charlie Kirk en Estados Unidos. Robinson ha sido acusado formalmente de homicidio agravado, entre otros cargos, y se enfrenta a la pena de muerte si es encontrado culpable. Robinson, de 22 años, responderá por siete cargos relacionados con el crimen ocurrido el 10 de septiembre.
Cargos contra Kirk
En concreto, Gray ha anunciado que presentará formalmente cargos por asesinato agravado; disparo de arma de fuego que causó lesiones corporales graves; obstrucción a la justicia por mover y ocultar el rifle utilizado en el tiroteo; obstrucción a la justicia por disponer de la ropa que llevaba puesta durante el tiroteo; manipulación de testigos por ordenarle a su compañero de habitación que borrara su texto incriminatorio; manipulación de testigos por ordenar a su compañero de habitación que permaneciera en silencio si la policía lo interrogaba; y comisión de un delito violento en presencia de un niño.
El asesinato, tirador poco experto
Charlie Kirk, cercano aliado al presidente Donald Trump, murió el miércoles durante un acto en una universidad de Utah. Era el fundador del grupo político juvenil conservador Turning Point USA. Según las autoridades, el sospechoso Tyler Robinson utilizó un rifle con mira telescópica para matar a Kirk de un solo tiro en el cuello desde un tejado. Los expertos consideran que el disparo fue mortal como consecuencia del propio error en el disparo, ya que impacto en el cuello (zona a la que nunca dispararía un buen tirador a escasos 125 metros de distancia). Fue arrestado después de 33 horas de persecución.
Kirk, activista pro-Trump
Kirk, casado con Erika Kirk y padre de dos niños, utilizaba habitualmente TikTok, Instagram y YouTube para difundir sus puntos de vista conservadores, incluidas duras críticas al movimiento por los derechos transgénero. También difundía fragmentos de sus interacciones en debates durante sus numerosos eventos universitarios. El director del FBI, Kash Patel, ha sido severamente criticado por su gestión tras el crimen, inclusive por anunciar demasiado rápido la captura de otro sospechoso que fue liberado dos horas después. La Casa Blanca dijo el lunes que perseguirá un supuesto «movimiento terrorista doméstico» de izquierda tras el asesinato del influencer, lo que despertó preocupaciones de que pueda ser utilizado para silenciar a opositores políticos.