El presidente del PNV, Aitor Esteban, y su predecesor, Andoni Ortuzar, celebrarán en Francia el próximo día 20 de septiembre la «recuperación» del Palacete de París. Apenas unos días antes de que el Gobierno tenga que hacer públicos los expedientes administrativos que entregaron el edificio.
El pasado 4 de septiembre, el Consejo de Transparencia instó a los ministerios de Memoria Democrática y Hacienda a que, «en un plazo de diez días hábiles», explicaran los motivos que impulsaron la restitución de tres inmuebles ubicados en Francia que fueron adjudicados al PNV. Entre ellos, el palacete de la avenida Marceau de la capital que utilizaba el Instituto Cervantes.
La resolución estimó los recursos presentados por la asociación Impulso Ciudadano y rechazó todas las objeciones presentadas tanto por el Gobierno como por el propio PNV para evitar hacer pública esta información.
Fuentes de Impulso Ciudadano han indicado a este periódico que la prisa del partido de Esteban por ocupar el palacete vendría motivada por el miedo a que Transparencia les arrebate finalmente el edificio.
Porque, inicialmente, el PNV acordó con el Gobierno que el Instituto Cervantes podía utilizar el palacete hasta el año 2030 a cambio de un alquiler, algo que «les resultaba un rentable negocio».
Sin embargo, el Instituto Cervantes abandonó el inmueble el pasado 13 de agosto sin que se haya conocido cuánto dinero ha abonado al PNV por su uso durante los últimos 8 meses.
Así, con la fiesta de la ‘toma de posesión’ del próximo sábado, los nacionalistas vascos se anticipan a lo que pueda ocurrir tras la respuesta del Gobierno al Consejo de Transparencia.
La rendición de cuentas del Gobierno debe producirse a los pocos días de esa fecha porque, aunque los «diez días hábiles» se cumplirían el jueves 18, es probable que los ministerios tomaran conocimiento de la orden de Transparencia unos días después debido al tráfico de notificaciones.
Pero, estas mismas fuentes indican que de la respuesta del Ejecutivo aún no se sabe nada. De hecho, dicen: «Estamos casi seguros de que no nos lo darán, sino que recurrirán la resolución del Consejo de Transparencia, con lo que el proceso se alargará.»
La resolución
El Consejo de Buen Gobierno consideró en su resolución que los expedientes de la entrega del palacete de París constituyen «información pública de interés general, vinculada al patrimonio estatal y a decisiones gubernamentales de gran trascendencia».
Además, rechaza los argumentos de protección de datos esgrimidos por el Ejecutivo, al considerar que «carecen de fundamento» ya que el PNV aparece como beneficiario de la norma y el resto de personas afectadas han fallecido o sus datos son accesibles en archivos públicos.
El traspaso del palacete —un inmueble de 1.309 metros cuadrados en la avenida Marceau de París valorado en decenas de millones— se realizó gracias a una modificación en la Ley de Memoria Democrática que el Consejo de Ministros aprobó en diciembre de 2024.
Este cambio normativo desactivó expresamente una sentencia del Tribunal Supremo de 2003 que negaba tanto la restitución del edificio al PNV como cualquier compensación económica, por no estar acreditada la incautación ni la titularidad del partido sobre el inmueble.
Pero el PNV llevaba años alegando que el palacete, sede del Gobierno vasco durante la Guerra Civil, le fue arrebatado por los nazis tras la ocupación de Francia.
El acto de «recuperación»
El evento del próximo sábado contará con la presencia del actual presidente del PNV, Aitor Esteban, junto a su predecesor Andoni Ortuzar, así como representantes institucionales y miembros del Gobierno Vasco con el lehendakari Imanol Pradales.
La secretaria del EBB, Maitane Ipiñazar, anunció que el partido organizará esta fiesta para celebrar que se «ha recuperado un pedacito de la historia del Partido Nacionalista Vasco y también de Euskadi».