¿Cómo iba a responder Marbella a la baja de Alcaraz? ¿Cómo iba a evidenciarse la diferencia entre las expectativas de la afición cuando compró sus entradas con la realidad patente este fin de semana? Pues ni la baja del murciano ni tampoco las altas temperaturas se impusieron a la afición local. Málaga y todo el público respondieron con nota al primer día de la segunda ronda de la Copa Davis.
La sombra de Alcaraz
Hubo para quien el tenista murciano era el gran protagonista de la jornada, incluso estando ausente. El Club de Tenis Puente Romano está rodeado por casas habitadas en su mayoría por público extranjero. Paseando, buscando un rato de sombra en este sábado tan caluroso, había quien se atrevía a preguntar a aficionados españoles: «¿Ha venido Carlos Alcaraz?». No tenían entradas, les daba igual, solo querían saber si el nuevo número 1 del tenis estaba por la zona y la decepción, como no podía ser de otra forma, era inmediata.
Pese a todo, la eliminatoria estuvo lejos de ser eminentemente malagueña. ¿Gente local? Poca, muy poca. El público nacional sí que vino desde muchos puntos del país como Sevilla, Elche, Alicante, Ibiza… Es la grandeza de un torneo como la Copa Davis. Ahora bien, la afición danesa fue bastante numerosa y pudo disfrutar de grandes momentos de tenis con su joven estrella Holger Rune.
Ambiente en las gradas
El espectáculo estuvo garantizado. Si alguien esperaba una grada completamente vacía después de las bajas de Alcaraz, el malagueño Alejandro Davidovich y Marcel Granollers, el ambiente estuvo bastante lejos de ser pobre. La grada supletoria estaba abarrotada. Apenas había sitios libres en los asientos propiamente del Club de Tenis Puente Romano Marbella.
Si se dio otra imagen desde la televisión es porque mucha gente optó por mantenerse en pie, buscando algún resquicio de sombra. Aunque bien es cierto que el segundo encuentro sí que notables evidencias de ver muy reducido su público. Solo hubo 20 minutos de descanso entre el primer y el segundo encuentro y había que hidratarse para resistir como fuera.
Las gradas del Club Puente Romano estuvieron cerca del lleno. / RFET/Germán Pozo
Altas temperaturas
Porque ni siquiera el calor le rebajó categoría al torneo. Las localidades alternaron los colores rojo y blanco. Hubiese sido fácil decir que era porque correspondían con las vestimentas de los españoles y los daneses. Había mucha gente de rojo con camisetas de ambas selecciones, sí, pero también se llenaron las gradas de abanicos blancos para reducir temperaturas. Seguro que este domingo se incrementa el número de cremas solares.
La charanga ‘Los Mihitas’ le puso la fiesta a esta segunda ronda de Copa Davis en Marbella. Ambientaron la previa del primer partido y, junto al encargado de la música, estuvieron tocando desde sus asientos. Lo volverán a hacer este domingo en la traca final de la eliminatoria.
Así que sí, la afición respondió a la altura de las circunstancias que se esperan del regreso de un torneo de estas características a la ciudad de Málaga. Lo había hecho en los últimos años con la Final a 8, también la última en la que se despidió Rafa Nadal, y, este fin de semana, Marbella volvió a demostrar que siempre es una elección acertada venir a la Costa del Sol. Incluso cuando Alcaraz, la gran estrella española y de la ATP, se cae en los días previos.