El centro de protección de menores Rosa Peñas, en la pedanía murciana de Santa Cruz, amaneció este miércoles blindado por la Guardia Civil, después de que ayer el delegado del Gobierno, Francisco Lucas, prohibiera una concentración que, según él, estaba convocando Vox a través de las redes sociales.
Lo que sí estaba programado era un encuentro del presidente de Vox en la Región de Murcia, José Ángel Antelo, y Samuel Vázquez, portavoz nacional del partido para temas de inmigración y seguridad, con los medios de comunicación a las puertas del citado centro de protección.
Este encuentro, en el que no se aceptaron preguntas, se celebró finalmente a la hora prevista pero no en la puerta del centro, ya que los efectivos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado impidieron el acceso. Sin embargo, el ‘canutazo’ no fue como Vox esperaba, puesto que también acudieron al acto un grupo de dirigentes y simpatizantes de Podemos capitaneados por el exdiputado morado Víctor Egío.
Tan pronto como Antelo comenzó a hablar, los «antifascistas», como así se denominaron, iniciaron a gritar soflamas como «No sobran migrantes, sobran fascistas» y «Fuera fascistas de nuestros barrios«. Todos ellos acabaron siendo identificados por los agentes.
Vítor Egío saluda tras ser identificado por la Guardia Civil. / Juan Carlos Caval
Antelo, que celebró que el centro de menores de Santa Cruz vaya a cerrarse en septiembre fruto del acuerdo de Presupuestos alcanzado en junio entre Vox y el PP, reiteró su discurso habitual sobre migración, señalando que si los padres de los menores migrantes «no les quieren, tendrán que ser los servicios sociales de sus países los que lo recojan«.
«Los ciudadanos de Santa Cruz van a poder estar con tranquilidad, viviendo en convivencia en sus barrios y en paz, algo muy necesario porque los ciudadanos de aquí están viviendo con miedo«, aseguró.

Los dirigentes de Vox se acercaron a saludar a los agentes de la Guardia Civil. / Juan Carlos Caval
Tras enumerar casos de delincuencia cometidos en los últimos meses por parte de ciudadanos extranjeros, Samuel Vázquez, de Vox, dijo que «los centros de menas son experimentos sociológicos que han salido mal en todos los territorios europeos donde se han desplegado» porque «no se integra absolutamente a nadie y los pocos chicos que vienen con comportamientos no violentos se contaminan una vez están dentro de esos centros».
Asimismo, criticó al delegado del Gobierno, asegurando que «está a la altura del gobierno al que defiende, de la banda organizada que defiende y del autócrata que está al frente de esa banda organizada».
Vox ha informado de forma posterior al acto que sus servicios jurídicos «estudian acciones legales» por las «órdenes ilegales» del delegado del Gobierno en la Región de Murcia.