El plan que maneja la Administración de Donald Trump para el futuro de Gaza contempla el desplazamiento forzoso de todos los habitantes de la Franja para convertirla en un centro turístico y manufacturero, informó ayer ‘The Washington Post’. El diario estadounidense publicó en exclusiva un documento de 38 páginas donde se detalla que Gaza sería controlada en régimen de fideicomiso por Estados Unidos durante al menos 10 años y requeriría reubicar como mínimo temporalmente a los dos millones de gazatíes durante la reconstrucción.
Las dos fórmulas que se manejan para acometer el desplazamiento de la población, asediada por Israel desde los ataques terroristas del 7 de octubre, sería mediante lo que denomina «salidas voluntarias» (según el prospecto) a otro país o a través del confinamiento de la población civil en «zonas restringidas y seguras» dentro del enclave.
El fideicomiso ofrecería a quienes posean terrenos un token digital a cambio de la cesión derechos para reurbanizar su propiedad, que se utilizaría para financiar una nueva vida en otro lugar o, eventualmente, se canjearía por un apartamento en una de las seis u ocho nuevas ciudades inteligentes impulsadas por IA que se construirán en Gaza, de acuerdo a ‘The Washington Post’. Cada palestino que acepte marcharse de Gaza recibiría un pago en efectivo de 5.000 dólares y subsidios para cubrir cuatro años de alquiler en otro lugar, así como un año de alimentos.
Este nuevo plan plantea la posibilidad de que EEUU lidere la reconstrucción de la Franja de Gaza, devastada por Israel, con financiación de inversores procedentes de los sectores público y privado, que desarrollarían megaproyectos comerciales que irían desde plantas de vehículos eléctricos hasta supuestos centros de datos o complejos turísticos.
Gaza Humanitarian Foundation
En español, este plan recibe el nombre de ‘Fideicomiso para la Reconstitución, Aceleración Económica y Transformación de Gaza’ (o GREAT, de sus siglas en inglés, ‘estupendo’ o ‘fabuloso’), y ha sido diseñado por israelíes que han trabajado con EEUU en la llamada Fundación Humanitaria de Gaza (GHF), cuyo desempeño no ha evitado la retención de toneladas de ayuda para los gazatíes y con operaciones en las que simultáneamente han muerto masacrados decenas de civiles.
El miércoles, el presidente Donald Trump se reunió en la Casa Blanca para debatir cómo poner fin al conflicto en Gaza con el secretario de Estado, Marco Rubio; el enviado especial presidencial, Steve Witkoff; el ex primer ministro británico, Tony Blair; y el yerno de Trump, Jared Kushner, con conocidos intereses privados en Oriente Medio. «No está claro si la propuesta detallada y completa del GREAT Trust es lo que Trump tiene en mente. Pero algunos elementos importantes, según dos personas familiarizadas con la planificación, se diseñaron específicamente para hacer realidad la visión del presidente de una ‘Riviera de Oriente Medio'», especificó el Post.
La filtración del plan se produce después de que el Departamento de Estado haya negado visados a las autoridades palestinas para acudir a la Asamblea General de la ONU en Nueva York el próximo septiembre. En febrero, Trump planteó la idea de que Estados Unidos se hiciera cargo de la Franja de Gaza para convertirla en la ‘Riviera de Oriente Medio’, una vez despojada de sus habitantes, que serían desplazados a Egipto y Jordania.
Israel ha asesinado a más de 63.400 personas en Gaza, en su mayoría civiles, desde los ataques de Hamás del 7 de octubre, según datos del Ministerio de Salud de Gaza.