Noche de bochorno la vivida en la final de la Leagues Cup de Estados Unidos. Luis Suárez, delantero del Inter de Miami, volvió a dejar una escena antideportiva más para su historial al escupir en la cara a un miembro del cuerpo técnico de los Seattle Sounders.
La escena se tradujo al final del partido, con victoria para los Sounders por 3-0. La tangana ensombreció el partido: las cámaras de Apple TV captaban con claridad a Suárez dirigir su escupitajo tras un altercado verbal.
En el centro del conflicto estuvo también Sergio Busquets. El centrocampista español se envió envuelto en la trifulca con empujones y golpes entre jugadores. El ex del FC Barcelona lanzó un puñetazo al jugador Obed Vargas, lo cual desató el conflicto nada más pitarse el final del encuentro.
Las imágenes, difundidas inmediatamente, han provocado una oleada de críticas y abren un procedimiento disciplinario contra los implicados.
En la rueda de prensa posterior Javier Mascherano, entrenador del Inter de Miami, negó haber visto el incidente y afirmó: «A nadie nos gusta que al final del partido haya este tipo de acciones, cuando hay una reacción, puede ser que haya una provocación, pero no sé qué es lo que pasó».
Suárez y Busquets están en el foco. El reglamento de la competición contempla sanciones por la participación en incidentes así.
La horquilla disciplinaria puede ir de uno a seis partidos según gravedad, además de castigarse de forma severa conductas que vulneren los principios de deportividad y respeto entre clubes.
🚨 Ojo con esto
Suárez intenta todo el tiempo provocar a Obed, se acerca Baker a celebrar con él y Busquets le tira un puñetazo a Vargas, castigo serio tiene que venir para el español
🎥: @AppleTV pic.twitter.com/WyAWrqDKOv
— Yeudiel Pacheco (@yeudielpacheco) September 1, 2025
El choque se disputó en el Lumen Field y concluyó con la victoria local por 3-0, en un partido en el que los Sounders castigaron la portería defendida por Óscar Ustari y certificaron su título ante la euforia de la afición local.
La derrota deja al Inter de Miami con menos opciones de salvar la temporada después de caer también en abril en la Copa de Campeones de la Concacaf frente a Vancouver Whitecaps, una eliminación que ya puso de manifiesto debilidades que volvieron a aparecer en esta final.
La presencia de Leo Messi no bastó para evitar el fracaso y la plantilla sufre una dependencia ofensiva visible; junto a él, nombres como Jordi Alba o el resto del bloque han demostrado irregularidad en momentos decisivos de la temporada.
En la MLS, el equipo está a once puntos del líder del Este, aunque con cuatro encuentros menos disputados, y su décima posición compromete sus ambiciones. La fragilidad defensiva y las goleadas encajadas han marcado la pauta en enfrentamientos clave.
La llegada del recién fichado Rodrigo de Paul se pensó para aumentar la creación, pero su incorporación tardía y la falta de adaptación inmediata no han bastado para elevar el rendimiento colectivo ni revertir la dinámica en competiciones eliminatorias.
Si el Inter de Miami no alcanza el MLS Supporters Shield ni asegura la gloria en los playoffs que otorgan la MLS Cup, el club firmaría su primera temporada en blanco desde 2022, un balance que aumentaría la presión sobre plantilla y dirección deportiva.
Mientras, las imágenes de Apple TV serán clave en el expediente disciplinario que decidirá las sanciones —posibles suspensiones de entre uno a seis partidos por una pelea multitudinaria— sobre Suárez y Busquets y otras medidas adicionales por sus agresiones concretas.