Un mando y un agente de la Policía Local de València, apoyados por la Guardia Civil, detuvieron en la madrugada del sábado al domingo a un hombre, D.F.O., que presuntamente estaba acosando fisicamente a mujeres en la verbena de las fiestas de Carpesa, y que portaba un cuchillo de cocina de 22 centímetros con el que amenazó a una pareja. Los hechos ocurrieron hacia las 2.50 horas de la madrugada cuando una pareja que estaba disfrutando del acto festivo se dirigió a los dos agentes de la Policía Local de València, que realizaban tareas de vigilancia y prevención en la pedanía, y les comunicaron que otro hombre estaba incomodando a la mujer y a otras asistentes a la verbena, acercándose a ellas y acosándolas junto al escenario y con la excusa de bailar con ellas. Además, el denunciante informó a los policías que al recriminarle su comportamiento al presunto acosador, este se le encaró y le sacó un gran cuchillo de 22 centímetros de largo con el que le amenazó además de lanzarle amenazas verbales que no pudo oir por lo elevado del volumen de la música del evento festivo.
Tras recabar este testimonio, los dos agentes, apoyados por una patrulla de la Guardia Civil que se personó en el lugar en esos momentos, fueron al lugar concreto de la verbena para localizar al presunto agresor. Rápidamente dieron con él ya que los denunciantes lo habían descrito con detalle: sudamericano, bajito, vestido con camiseta blanca, gorra negra y mochila negra. El propio hombre amenazado también lo identificó.
Fue sacado de la verbena y conducido a un espacio reservado
Con el objetivo de evitar un incidente mayor, los agentes procedieron a sacar al presunto agresor del sitio y lo llevaron a un reservado, fuera del público asistente a la verbena. Para ello, lo sujetaron por los brazos para que no pudiera utlizar ningún objeto cortante, según explican fuentes policiales. Una vez en el lugar apartado, los funcionarios le preguntaron si llevaba algún tipo de arma blanca, y este reconoció que efectivamente la llevaba. Al proceder a su registro corporal exterior, de forma cuidadosa, los agentes le localizaron este cuchillo de cocina de grandes dimensiones, que llevaba oculto entre el pantalón y el calzoncillo, en la parte trasera derecha, y con la punta hacia arriba.
Mientras el detenido era vigilado por los agentes, se procedió a identificar a los dos ciudadanos involucrados en este desagradable incidente. Ambos resultaron ser dos personas de nacionalidad peruana, que de manera formal y oficial formularon su denuncia y reiteraron el relato ya expuesto. En particular, la mujer relató el malestar que le produjo la cercanía y el contacto físico no deseado por parte del denunciado. A renglón seguido, el principal implicado fue trasladado a la Comandancia de la Guardia Civil en Tavernes Blanques y los funcionarios abrieron dilgencias previas, por si todo lo ocurrido pudiera ser constitutivo de algún tipo de delito. El ciudadano detenido tiene nacionalidad colombiana y también dispone de permiso de residencia en Brasil. El cuchillo fue incautado y quedó a buen recaudo en el puesto de Tavernes.