En las vitrinas se pueden encontrar todo tipo de camisetas gráficas que recuerdan a postales de lugares veraniegos. Positano, Maldivas, Amalfi o Brasil son algunos de los lugares que inspiran los diseños de las marcas más populares, especialmente aquellas enfocadas en la Gen Z. Ahora, los amantes de la moda pueden adquirir un souvenir de los lugares más exclusivos o exóticos sin salir de España.
Camiseta de Zamora. / Matraca
Esta temporada, la ‘camiseta souvenir’ se ha convertido en una declaración estética. Ya no cumple la función tradicional de recordar un lugar visitado, sino que adopta un nuevo rol: proyectar una fantasía emocional y visual. Más que una referencia geográfica, representa un destino imaginado, deseado, que se lleva puesto como un símbolo de aspiración. Maldivas o Positano no son necesariamente lugares que quien usa la camiseta haya recorrido, sino evocaciones de un estilo de vida soñado.
Todo empezó con un «I love Nueva York»
En este nuevo código visual, la camiseta funciona como un vehículo de escapismo. Sus gráficos, muchas veces inspirados en postales vintage, remiten a veranos idealizados del pasado: una vida ligera, soleada y libre. Para la Gen Z, estas prendas no necesitan autenticidad geográfica. Basta con lo que evocan: deseo y emoción.
Según Hugo Pinazo, Coordinador académico de la escuela de Moda del IED Madrid, la clásica camiseta I love NEW YORK nació para promocionar el turismo y servía como souvenir que demostraba que habías visitado la ciudad. “Así, amigos y familiares podían presumir de que habías estado en la ciudad que nunca duerme. En cambio, las camisetas actuales que muestran publicidad de ciudades transmiten la idea de que hoy todo el mundo puede viajar: da igual si has estado o no en ese lugar, porque igualmente lo conoces«.
Para Pinazo, no es una tendencia exclusiva de la Gen Z. “Ya se había visto antes, pero entonces tenía más sentido como recuerdo real de un viaje. La diferencia es que ahora, con la globalización y las redes sociales, se ha hecho mucho más grande y se lleva más por estética o por ese toque kitsch, sin que importe si conoces el lugar o no”.
En cuanto a la relación entre destinos turísticos y moda, destaca que “la mayoría de esta estética es más típica del verano, y los estampados con nombres de ciudades suelen hacer referencia a lugares que uno asocia con las vacaciones, usando colores marinos, tropicales y motivos como frutas”.