Una decena de vehículos acabó ayer afectada por las llamas de un incendio que se desató por la tarde en el centro comercial madrileño Intu Xanadú.
El origen del fuego, confirmado, fue una colilla de una persona que estaba esperando el autobús que cayó sobre el césped, el que empezó a arder. Las llamas se propagaron rápidamente y afectaron a diez coches, de combustión, sin que haya que lamentar heridos de ningún tipo.
Pero, ¿qué pasa con los coches? ¿Quién se encarga de cubrir los daños?
¿Paga el seguro?
Cuando se trata de un escenario en el que hay un incendio sin que se sepa quiénes son los culpables o por cualquier tipo de incidente, se encarga de cubrir los daños el propio seguro del coche.
Es decir, el propietario del vehículo tendrá que ponerse en contacto con su empresa de seguros para que se haga cargo, siempre y cuando estos supuestos estén reflejados en las condiciones de la póliza. Habitualmente, son las a todo riesgo o las ampliadas las que cubren los daños por el fuego.
En estos casos suele ser imposible mandar el coche a reparar, así que la aseguradora indemniza al propietario según el valor del coche. Si se ha quemado un coche y tenía menos de 24 meses, lo que paga el seguro a su propietario corresponde al coste que supondrá la adquisición del mismo vehículo nuevo en el momento del siniestro.
Si, por el contrario, se ha quemado un coche con más de 24 meses, lo que paga el seguro a su propietario corresponde al valor que se abonaría, en el momento del siniestro, si se pone a la venta, lo que también se conoce como valor venal.
El Consorcio de Compensación
Eso sí, hay que tener en cuenta que si el incendio se debe a una imprudencia o negligencia del conductor del vehículo o responde a una manifestación o un acto de terrorismo, el seguro no se hará cargo de la indemnización. En estos segundos supuestos más excepcionales, será el Consorcio de Compensación de Seguros el que abone la correspondiente cantidad de dinero al propietario del vehículo.
Volviendo al caso del centro comercial Xanadú, por lo que han confirmado las fuentes oficiales se sabe que una persona lanzó la colilla que originó en el incendio. En los casos en los que sí se sabe quién ha sido el que ha provocado las llamas y, por tanto, los daños en los coches,se verá obligado por vía de responsabilidad civil a indemnizar los daños causados a los propietarios de los vehículos.