Álex Palou (1 de abril de 1997, Sant Antoni de Vilamajor) ha vuelto a escribir un nuevo capítulo en la historia del automovilismo español tras haberse proclamado campeón de la IndyCar por cuarta vez, la tercera de forma consecutiva.
Al español le han sobrado dos carreras para defender un campeonato que ya ganó en 2021, 2023 y 2024. Portland se ha convertido otra vez en un escenario especial para él. Palou se ha convertido en el cuarto piloto en la historia en ganar tres títulos consecutivos de la IndyCar.
A sus 28 años, el español sumó su tercer campeonato consecutivo y el cuarto en cinco temporadas, entrando en un grupo de leyendas como Ted Horn, Sébastien Bourdais y Dario Franchitti, los únicos en lograr tres títulos seguidos.
El Portland International Raceway no es un circuito cualquiera para el español. Es, en muchos sentidos, su territorio sagrado en la IndyCar. En cuatro participaciones, ha logrado dos victorias, un segundo puesto y apenas un mal resultado en 2022.
Más significativo aún es el valor sentimental de esta pista: fue precisamente allí donde en 2023 conquistó su segundo campeonato con una carrera de antelación, convirtiéndose en el primer piloto en 16 años en asegurar el título antes de la última carrera.
Este 2025 no pudo lograr la victoria que acabó cayendo del lado de Will Power. El segundo fue Christian Lundgaard y el último puesto del cajón fue el que ocupó un Alex Palou para el que no ha peligrado el título en ningún momento debido a los problemas mecánicos de Pato O’Ward.
Golpe en la mesa
Tras acabar la carrera de Portland, Palou estaba exultante de felicidad y calificó su cuarto título de «increíble, una locura».
«No, no podría estar más feliz ahora mismo. Esta ha sido una temporada increíble, unos años increíbles con Chip Ganassi. No tengo palabras para describir lo agradecido que estoy con todos, especialmente con Chip», explicó.
Sobre su victoria con dos pruebas aún por disputar, Palou tenía claro el secreto: «Mi equipo, el equipo que tengo detrás de mí, Honda que nos ha dado toda la potencia que necesitábamos cada fin de semana, pero mi equipo, el coche ha sido increíble…»
«Hoy fue una pena que no pudiéramos lograr otra victoria, pero lo peleamos. Yo, dí todo lo que tenía. Intenté todo para tratar de adelantar a Lundgaard, pero no pude lograrlo hoy», aseguró sobre la prueba de este domingo.
Dominio arrollador
La temporada 2025 del piloto catalán ha sido excepcional en números y regularidad. En las 15 carreras disputadas ha logado 8 victorias, 5 poles, 12 finales entre los cinco primeros y 13 top-10, liderando la estadística en casi todos los apartados.
Con 7 triunfos hasta Iowa, se unió a figuras como A.J. Foyt, Alex Zanardi, Juan Pablo Montoya y Sébastien Bourdais, y marcó la mejor cifra de victorias en una temporada desde 2007. Además, igualó a Ryan Hunter-Reay con 18 triunfos en su carrera.
El inicio de campaña fue arrollador, con cinco victorias en las seis primeras pruebas, igualando el registro histórico de A.J. Foyt en 1979.
El momento más emblemático llegó el 25 de mayo de 2025, cuando se convirtió en el primer español en ganar las 500 Millas de Indianápolis, una victoria decisiva para consolidar su liderato.
Otro punto fuerte de la temporada fue su progreso en óvalos, donde logró victorias en Iowa, superando una de sus debilidades históricas.
En Portland, Palou llegaba con 121 puntos de ventaja sobre O’Ward y solo necesitaba mantener una diferencia mínima de 108. El fallo mecánico del piloto de McLaren se lo puso en bandeja pero el español luchó por la victoria hasta las últimas vueltas.
Con dos carreras por disputarse, Palou tiene la oportunidad de igualar el récord histórico de 10 victorias en una temporada, vigente desde las campañas de A.J. Foyt (1964) y Al Unser (1970).
Su dominio recuerda al de Scott Dixon en 2006, con una combinación de velocidad, constancia y estrategia que lo ha hecho casi imbatible. Como señaló Dixon: «A veces simplemente tienes años así y todo fluye«.
El sueño de la F1
En el último año, Palou ha reconocido que su interés por llegar a la Fórmula 1 es prácticamente nulo. El piloto español considera que «es demasiado tarde» para dar el salto, pese a que su talento es ampliamente reconocido.
Su vínculo más cercano con la F1 se dio entre 2022 y 2023, cuando fue piloto reserva de McLaren, participando en entrenamientos y test y con una cláusula que le liberaba si recibía una oferta como titular.
Sin embargo, rompió su contrato para seguir en Chip Ganassi Racing, lo que derivó en un conflicto legal, que a la larga ha resultado merecer la pena tras tandos éxitos deportivos acumulados.
La llegada de Cadillac a la F1 en 2026 generó especulaciones por su conexión con General Motors y su experiencia con la marca en resistencia, además del respaldo de Mario Andretti. No obstante, Palou reveló que nunca hubo contacto y que la prioridad del proyecto es un piloto estadounidense.
Desde Williams, James Vowles explicó que Palou no fue opción para 2025 debido a su alto coste, la necesidad de un largo programa de adaptación -con hasta 10.000 kilómetros de pruebas- y un año sabático previo, como hicieron Antonelli o Bearman.
Carlos Sainz, amigo y excompañero en karting, defendió que Palou merece al menos una oportunidad en F1, destacando su calidad y victorias, como las 500 Millas de Indianápolis.
Sin embargo, el propio Palou valora más la estabilidad y la competitividad inmediata que ofrece la IndyCar. Prefiere luchar por victorias reales a ocupar asientos sin opciones de triunfo y disfruta de un ambiente más cercano, tanto con equipos como con su familia.
Salvo una improbable llamada de Cadillac, el escenario apunta a que Palou seguirá en Estados Unidos, consolidando su legado allí y dejando en pausa definitiva el sueño de la Fórmula 1.