Un triple sobre la bocina de Guillermo del Pino, autor de 23 puntos, nueve de ellos en los últimos 27 segundos, dio este domingo a España su sexto Europeo sub-18 al culminar la remontada ante una Francia que tuvo el triunfo en sus manos y se quedó con la miel en los labios por el acierto del base cordobés. Italia completó el podio al llevarse la medalla de bronce al imponerse a Letonia por 86-68.
España, que llegaba lanzada a la final, careció del acierto de partidos anteriores y sufrió para contener las acometidas galas. Dominó en varias fases del partido, llegó empatada al descanso y pudo pagar caro su desacierto en el tercer cuarto, aunque reaccionó en el último, en el que no perdió la fe y tuvo a Del Pino como su gran revulsivo.
El mejor jugador del combinado español anotó dos triples, una canasta de dos puntos y un tiro libre en los últimos 27 segundos y dio en el último instante el triunfo a los de Marco Justo, que ya suman seis títulos en categoría masculina.
El partido arrancó sin un dominador claro, con ambos equipos volcados en ataque y peleando bajo aros por hacerse con el control del rebote. Francia golpeó primero con cinco puntos de Maxence Lemoine pero España respondió con buenas acciones de Del Pino e Ignacio Campoy, autores de 8 y 6 puntos en el primer acto, respectivamente.
Los jugadores españoles buscaban imprimir velocidad a sus acciones al contraataque y poco a poco fueron haciéndose con la final. Llegaron a disponer de rentas de seis puntos que al final de los primeros diez minutos se quedaron en tres (25-22, min 10).
La tendencia se mantuvo en la reanudación, aunque poco a poco España se fue atascando y enlazando errores en ataque, lo que aprovecharon los galos para retomar el mando en el marcador.
Los puntos de Hugo Yimga -mejor jugador galo con 17 puntos y 9 rebotes- y un triple de Boulefaa empataron el partido a 35 a tres minutos del final del segundo acto y un tiro a media distancia en la jugada siguiente de Lemoine, máximo anotador de su equipo al descanso con once, obligó al banquillo español a parar el partido para evitar daños mayores.
La primera parte terminó con empate a 39 y todo por decidir en los dos últimos actos. El tercero comenzó sin un dominador claro, con dominio alterno aunque el equipo francés anotaba con más facilidad y poco a poco fue distanciándose en el marcador (45-53, min 24).
Con las ideas más claras, una férrea defensa y su dominio en el rebote, los jugadores que entrena Elise Prodhomme siguieron consolidando su ventaja ante un rival que se precipitaba en ataque, carecía de la claridad de ideas de partidos anteriores y era incapaz de contener las acometidas francesas.
Los fallos desde la línea de tiros libres tampoco ayudaron a un equipo español que careció de un referente ofensivo en un mal tercer cuarto (14-25) que terminó con una desventaja de once puntos que obligaba a reaccionar en los últimos diez minutos (53-64, min 30).
De inicio, el intercambio de canastas en el cuarto definitivo beneficiaba a los franceses. España no se rindió y poco a poco fue recortando distancias hasta situarse a cinco puntos pasado el ecuador del acto tras una canasta de Andy Huelves que obligó a Prodhomme a pedir tiempo muerto (65-70, min 36).
A menos de dos minutos del final la desventaja era de cuatro puntos y en los últimos 27 segundos todo parecía pardido (73-79). Apareció entonces Guillermo del Pino, que con nueve puntos y un triple sobre la bocina culminó la remontada y selló la medalla de oro para el equipo español.
La medalla de bronce se la llevó Italia, que derrotó en el partido por el tercer puesto a Letonia por 86-68.