A pesar de las altas temperaturas, la Marxa des Güell a Lluc a Peu volvió a desafiar un año más al calor. Más de 8.000 personas han participado en esta tradicional cita que arrancó ayer poco antes de la medianoche y ha finalizado hoy con la salida del sol en el santuario de Lluc, en el corazón de la Serra de Tramuntana. Antes de darse el ‘sus’, los inscritos, y también muchos vecinos de Palma, disfrutaron de una jornada que incluyó música y una exhibición de zumba. También hubo un homenaje a los voluntarios en el desastre de la dana. El maestro de ceremonias, el encargado de calentar el ambiente antes de la esperada salida, fue Manu Blanco.