Las expectativas de inflación de los consumidores de EEUU para los próximos 12 meses, que recoge la Universidad de Michigan en su sondeo sobre la confianza del consumidor, han caído en julio hasta el 5% desde el 4,5% de junio. El dato, que retrocede por segundo mes consecutivo, marca su lectura más baja desde febrero de 2025, pero todavía se mantiene por encima de la cifra de diciembre de 2024, justo después de las elecciones presidenciales.
Por su parte, las expectativas de inflación a largo plazo han descendido por tercer mes consecutivo, pasando del 4,0% de junio al 3,4% de julio. Esta es la lectura más baja desde enero de 2025 pero, nuevamente, sigue siendo considerablemente más alta que la lectura de diciembre de 2024.
En el caso del índice del sentimiento del consumidor, ha subido un punto para alcanzar los 61,7 en julio, mientras que el índice de las condiciones económicas actuales ha mejorado hasta 68 unidades desde las 64,8 del mes anterior, su lectura más alta desde febrero de 2025. En el lado contrario se ha situado el índice de expectativas del consumidor, que cae a 57,7 puntos en el séptimo mes del año.
«Un aumento en la confianza entre los accionistas fue parcialmente compensado por una disminución entre los consumidores que no poseen acciones», ha explicado Joanne Hsu, directora de la encuesta.
La experta también ha comentado que las percepciones de los desarrollos económicos de este mes han sido similares en todo el espectro político: republicanos, independientes y demócratas vieron algunos aumentos menores en el sentimiento este mes.
«Aunque las tendencias recientes muestran que el sentimiento se mueve en una dirección favorable, el sentimiento sigue siendo ampliamente negativo. Los consumidores no son optimistas sobre la trayectoria de la economía, incluso cuando sus preocupaciones se han suavizado desde abril de 2025″, ha concluido Hsu.