La última palabra la tienen los ciudadanos, no los jueces

El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, defendió este viernes desde Shanghái (China) que la ley de amnistía aprobada por las Cortes debe prevalecer sobre lo que decidan los jueces.

“En una democracia, la última palabra la tienen los ciudadanos y no los jueces. El legislativo ha hablado con claridad”, señaló Illa ante los periodistas, durante su viaje oficial a China, tras recordar que el Tribunal Constitucional ya ha avalado la amnistía.

Aunque sin mencionar su nombre, Illa expresó su deseo de que la norma entre en vigor plenamente, para que el expresidente Carles Puigdemont pueda regresar a España tras el verano.

“Deseo que todos los actores políticos catalanes puedan desarrollar y ejercer su actividad política. Trabajaré para ello”, indicó en declaraciones recogidas este sábado por La Vanguardia.

Durante su viaje oficial a China, que concluyó el viernes, Illa se ha reunido con dirigentes del Partido Comunista chino y de compañías como Huawei, gracias al camino abierto por el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero.

Este mes de agosto, Salvador Illa tiene previsto disfrutar de unos días de sus vacaciones en La Mareta (Lanzarote), por invitación del presidente Pedro Sánchez, que ha llegado este sábado a la isla.

Como ya ocurrió el verano pasado, ambos coincidirán con Zapatero (que posee una vivienda en Lanzarote), para diseñar la estrategia del nuevo curso político.

El presidente Pedro Sánchez no ha conseguido cumplir aún todos los compromisos que adquirió con Junts, de cuyo apoyo depende la continuidad del Gobierno. Y esta es una de las principales amenazas para la estabilidad de la legislatura.

La Comisión Europea ha rechazado ya siete veces adoptar el catalán, el euskera y el gallego como lenguas oficiales de la UE. Pese a que el Gobierno español se comprometió a asumir todos los gastos de intérpretes y traducción.

El traspaso «integral» de las competencias sobre inmigración y extranjería a la Generalitat (que Puigdemont presenta como otro paso decisivo hacia la independencia) no tiene garantizada la mayoría necesaria para salir adelante en las Cortes.

Y, sobre todo, Puigdemont sigue sin poder regresar a España. Aunque el Tribunal Constitucional de Cándido Conde-Pumpido avaló la ley de amnistía, el Tribunal de Justicia de la UE (TJUE) debe resolver ahora las cuestiones prejudiciales planteadas por el Supremo y otras estancias.

El ‘cupo catalán’

Pero la continuidad del Gobierno depende también de los compromisos adquiridos con ERC, como el cupo catalán para que la Generalitat pueda recaudar todos los impuestos que se pagan en Cataluña.

Al respecto, Salvador Illa ha garantizado desde Shanghái (China) que la Agencia Tributaria Catalana (ATC) asumirá en 2028 la “gestión entera del impuesto del IRPF, que es el más importante y la más nuclear”.

“El Gobierno no vende humo. Es una hoja de ruta realista y todo ello no se hace en un día”, recalcó. Sin embargo, en su acuerdo de investidura, el PSC prometió al partido de Junqueras que ese paso sería efectivo en 2026. Es decir, dos años antes.

Frente a las críticas de ERC, Illa ha elogiado también el firme compromiso de la vicepresidenta de Hacienda, María Jesús Montero, para aprobar la «financiación singular» de Cataluña.

Aunque estos elogios no ayudan especialmente a Montero, quien como candidata del PSOE a la Presidencia de la Junta de Andalucía insiste en que jamás va a permitir «privilegios de una región sobre otra«.

ERC tildó el viernes de «humo» el compromiso de recaudar la totalidad del IRPF en 2028 y reclamó al presidente Pedro Sánchez que «se ponga las pilas» para comenzar a tramitar ya las reformas legales necesarias que permitan poner en marcha la financiación privilegiada de Cataluña (que copia el modelo de las haciendas forales de Navarra y el País Vasco).

El acuerdo suscrito entre el presidente Salvador Illa y el ministro de Administraciones Públicas, Ángel Víctor Torres, el nuevo sistema de financiación tampoco incluye otro de los compromisos adquiridos por el PSC con ERC: el principio de «ordinalidad».

Pese a ello, la viceprimera secretaria y portavoz del PSC, Lluïsa Moret, garantizó este sábado que el nuevo modelo de «financiación singular» incluirá este principio de «ordinalidad», por el cual Cataluña nunca debe perder posiciones respecto al resto de CCAA, tras realizar su aportación a la «solidaridad».

«Uno de los principios básicos en los que se basa el modelo de financiación singular de Cataluña es la ordinalidad», ha recalcado Moret en una entrevista a Europa Press, «nuestro presidente lo ha dicho de forma reiterada en sus discursos. Por tanto, la ordinalidad forma parte del modelo y nosotros lo mantenemos así», garantizó.

En la entrevista, Moret ha eludido pronunciarse sobre la conveniencia de que el presidente Salvador Illa se reúna con Carles Puigdemont, que aún no puede pisar España: «Quien debe hablar de la agenda del presidente es el presidente«.

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