Karlos Arguiñano ha preparado bollitos rellenos fritos de la abuela Jacinta con lo que nos muestra que la creatividad en la cocina puede ser tan sencilla como aprovechar lo que tenemos en la nevera. Ya sea un poco de lomo, pollo, queso, huevo o verduras cocidas, el relleno de estos bollitos puede variar según nuestros gustos y necesidades, lo que los convierte en un plato versátil y perfecto para cualquier ocasión.
El proceso de elaboración es bastante sencillo, y la magia está en el momento en que se fríen los bollitos, cuando la masa crujiente y dorada envuelve el relleno suave y sabroso. Es entonces cuando podemos disfrutar de la verdadera esencia de esta receta, que nos recuerda al sabor de la cocina casera.