La Justicia ha dado la razón a la Iglesia y ha ordenado a las monjas cismáticas de Belorado a abandonar el convento, terminando así el conflicto iniciado hace más de un año, después de que las religiosas rompieran con el Vaticano.
La jueza de Primera Instancia e Instrucción de Briviesca (Burgos), en un auto al que ha tenido acceso EL PERIÓDICO, ha estimado en su totalidad la demanda de desahucio presentada el 16 de septiembre de 2024 por el Comisario Pontificio como Superior Mayor, Administrador y Representante Legal del Monasterio de Belorado.
Así, declara «haber lugar al desahucio de la parte demandada de la referida finca, cuya posesión deberá entregar a la actora y condeno a la parte demandada a que desaloje, deje libre y expedita y a disposición de la parte actora la referida finca, con apercibimiento de lanzamiento si no lo hiciere voluntariamente»