La empresa Enagás Transporte ha obtenido la declaración de utilidad pública para su proyecto de instalaciones al gaseoducto de Salamanca-Zamora con el fin de inyectar biometano en el término municipal de Peleas de Abajo.
Así lo ha anunciado la Asociación de Biogás Así No-Jambrina Lucha que alerta del «desconcierto» del pueblo al ver que las parcelas donde Enagás quiere llevar a cabo su proyecto «son las mismas» en las que la empresa promotora Norton Dos Ibérica fue multada por iniciar unas obras sin evaluación ambiental aprobada para la instalación de una planta de biogás tras la denuncia de vecinos y asociaciones.
Desde la asociación recuerdan que a día de hoy dichas tierras no se han restituido a su estado original y el asunto está en los tribunales por un posible delito ambiental por parte de la empresa Norton Dos Ibérica.
La asociación ha presentado alegaciones al proyecto de Enagás Transporte solicitando el archivo del mismo «en su propósito de hacer cumplir la ley y asegurar la transparencia en los trámites relacionados con el biogás». Entre los argumentos clave, se incluyen las propias resoluciones de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León «donde se reconoce que las parcelas en cuestión son un área sensible para aves esteparias como el sisón y la avutarda». Estas aves en cuestión se encuentran especialmente protegidas tanto por la normativa autonómica, nacional como comunitaria como es la conservación de los espacios Red Natura 2000, su entorno y las especies que lo conforman.
Al tiempo, lamentan que la «falta de transparencia» en la tramitación de estos proyectos energéticos se vea «agravada por la ausencia de un marco legislativo adecuado».
Aluden a falta de información sobre los plazos de aprobación del Decreto o Plan Regional para el biogás en la Comunidad, un documento que consideran clave para establecer las distancias mínimas entre instalaciones industriales de este tipo o las distancias mínimas a las poblaciones teniendo en cuenta criterios como los vientos predominantes o la sensibilidad social. «Este último punto es especialmente importante para los vecinos de Jambrina y los pueblos de los alrededores que se ven directamente afectados por estas instalaciones», argumentan.