La Agencia Meteorológica de Japón (JMA) emitió este miércoles una alerta de tsunami para las costas del Pacífico del país tras producirse un terremoto de magnitud 8,6 frente a las costas del sur de la península rusa de Kamchatka, al norte del territorio.
«El terremoto de hoy fue grave y el más fuerte en décadas de temblores», declaró el gobernador de Kamchatka, Vladimir Solodov, en un video publicado en Telegram.
Añadió que, según información preliminar, no hubo heridos, pero una guardería resultó dañada.
El sismo se produjo a las 8:25 hora local japonesa (23:25 GMT del martes). Aunque la JMA no determinó la profundidad del terremoto, el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) indicó que tuvo una profundidad superficial de 19,3 km.
Según sus datos, su epicentro se encontraba a unos 125 km (80 millas) al este-sureste de Petropavlovsk-Kamchatka, una ciudad de 165.000 habitantes ubicada en la costa de la bahía de Avacha.
A raíz del temblor, las autoridades meteorológicas japonesas decidieron activar un aviso de tsunami en las costas del Pacífico. Se estima que las olas podrían llegar hasta los tres y cuatro metros de altura y que alcancen extensas zonas costeras a partir de la 01:00 GMT.
Se han emitido órdenes de evacuación en distintas zonas de Japón, concretamente en la zona sur de Hokkaido, la isla más septentrional del territorio y ubicada al suroeste del epicentro del terremoto, así como zonas del noreste, este, centro y sudoeste del archipiélago japonés.
Pese a su gran magnitud, el terremoto apenas se notó en Japón, donde alcanzó el nivel dos de la escala sísmica nipona de siete niveles (centrada en medir la agitación en la superficie y el potencial destructor del temblor) en las ciudades de Kushiro, Akkeshi, Shibetsu y Betsukai, en el extremo sureste de Hokkaido.
El USGS también emitió una alerta de «olas de tsunami peligrosas» en las próximas tres horas a lo largo de algunas costas de Rusia, Japón y Hawái.
Kamchatka y el Lejano Oriente ruso se encuentran en el Anillo de Fuego del Pacífico, una región geológicamente activa propensa a grandes terremotos y erupciones volcánicas.