Del 17 al 19 de julio, Alcobendas se convirtió en el epicentro de la escalada internacional con la celebración de la IFSC Climbing World Cup Comunidad de Madrid 2025. El evento reunió a los mejores escaladores del panorama mundial en una competición llena de emoción y adrenalina. Además, las actividades culturales y deportivas que estaban programadas llenaron de ambiente el recinto. Campofrío también se unió al evento con una muestra de su producto estrella del que todos los aficionados pudieron disfrutar.
En la jornada previa a la competición, durante la tradicional entrega de dorsales, la marca repartió una bolsa de competición para cada participante que incluía un Snack’IN de Campofrío de regalo. Esta iniciativa, pensada para acompañar a los más de 170 competidores de élite que competían en la Copa del Mundo de escalada, estaba enfocada en ofrecer un producto que es práctico, sabroso, nutritivo y que, además, es alto en proteínas, el snack perfecto para recargar energías en un entorno deportivo de máxima exigencia y nivel.
Bolsa de competición para cada participante que incluía un Snack’IN de Campofrío de regalo / Prensa Ibérica
Esencial para la competición
La participación de Campofrío en el evento no fue una mera coincidencia, sino que responde a una vinculación de la marca con el mundo de la escalada. Su gama de productos Snack’IN pretende conectar con una generación activa, inconformista y siempre en movimiento, que no conoce límites y afronta los retos con la misma determinación, agilidad y fuerza que se necesitan para escalar una pared.
Esta colaboración cobra aún más sentido al tratarse de un deporte que fusiona lo urbano y lo outdoor, en perfecta sintonía con el estilo de vida de quienes eligen Snack’IN como su opción favorita para tomar en cualquier lugar, sin complicaciones.
Un escalador en el rocódromo central de la Copa del Mundo de escalada en Madrid / Prensa Ibérica
Éxito rotundo de participación
La Copa del Mundo de escalada, organizada por Prensa Ibérica, la Federación Internacional de Escalada Deportiva (IFSC) y B3, con el apoyo de la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Alcobendas, fue todo un éxito. Los datos de asistencia así lo confirman, con más de 40.000 personas visitando el recinto.
La Copa del Mundo de escalada combinó la competición con el ocio y la cultura deportiva. Entre los deportistas y autoridades asistentes, destacaron la gimnasta olímpica Ana Arnau y el taekwondista olímpico Jesús Tortosa, así como el presidente del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco, o el presidente de la IFSC, Marco Scolaris. Junto a ellos, también participaron otras figuras claves del deporte nacional e internacional y de la escalada, como los hermanos Pou y Chris Sharma.
Uno de los rocódromos de la Copa del Mundo de escalada en Madrid / Prensa Ibérica
Emoción e inclusión en el torneo
En el ámbito competitivo, cerca de 180 escaladores se disputaron las medallas en la Copa del Mundo de dificultad. La gran final, que se vivió con un recinto completamente abarrotado, comenzó con la categoría femenina, donde la estadounidense Annie Sanders se alzó con el oro, seguida de la italiana Laura Rogora (plata) y la también estadounidense Brooke Raboutou (bronce). Respecto a la categoría masculina, el español Alberto Ginés volvió a desatar la locura entre el público con una actuación en el rocódromo que le aseguró la medalla de plata. Fue superado por un pequeño margen por el surcoreano Dohyun Lee, mientras que el japonés Satone Yoshida se llevó el bronce.
Asimismo, en el torneo también hubo tiempo para las exhibiciones, como la de paraescalada, protagonizada por figuras como Guillermo Pelegrín, junto a su guía Toni Curiel, Javier Aguilar, Andrea Sánchez y Paula de la Calle, quienes demostraron que la escalada puede ser inclusiva y que la superación no entiende de límites. Esta actividad tuvo un protagonismo especial, debido a la futura entrada de la paraescalada como disciplina paralímpica en Los Ángeles 2028.
La IFSC Climbing World Cup Comunidad de Madrid 2025 fue una celebración del deporte en su máxima expresión, un torneo que quedará en la memoria colectiva de Madrid, gracias al éxito de asistencia y al ambiente generado en el recinto.
