El Gobierno neerlandés ha vetado la entrada a Países Bajos a dos ministros ultranacionalistas y colonos israelíes -el de Finanzas, Bezalel Smotrich, y el de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir– por incitar a la “limpieza étnica” en Gaza.
Ha decidido también convocar este martes al embajador israelí en el país, dada la “intolerable e indefendible” situación humanitaria en la Franja.
Países Bajos sigue así la estela de Reino Unido, Canadá, Australia, Nueva Zelanda y Noruega, países que tomaron medidas similares el mes pasado contra estos dos ministros de extrema derecha.
Ante estos hechos, el ministro de Exteriores israelí ha respondido en la misma línea y ha convocado a la embajadora de Países Bajos, Marriët Schuurman, ante quien ha lamentado que el Gobierno neerlandés «haya decidido convertir una larga amistad en una hostilidad abierta».
En una carta enviada esta madrugada al Parlamento, el ministro de Exteriores neerlandés, Caspar Veldkamp, ha denunciado que “el bloqueo humanitario impuesto” por Israel somete a la población gazatí a “privaciones extremas y continuas”, generando “condiciones de vida insoportables” en la Franja.
Señala que la situación obliga a Países Bajos a anunciar medidas de presión: “El gobierno decidió declarar personas no gratas a Smotrich y Ben-Gvir y registrarlos como extranjeros indeseables en el sistema SIS de Schengen», ha anunciado.
Basan su decisión en la «incitación continua a la violencia de colonos, su defensa de los asentamientos ilegales y sus llamados a una limpieza étnica en Gaza”, denuncia Veldkamp.
Además, dada esta situación humanitaria “intolerable e indefendible” en Gaza, el ministro ha convocado al embajador israelí para “insistir en que Israel debe cambiar de rumbo” y recordarlo sus obligaciones según el derecho internacional humanitario.
«Hostilidad abierta» contra Israel
El ministro de Exteriores israelí, Gideon Saar, ha convocado este martes a la embajadora de Países Bajos, Marriët Schuurman, para una hacerle llegar «reprimenda formal» tras las «decisiones» tomadas «contra» Israel.
En el encuentro, Saar le ha trasladado a Schuurman que el Gobierno holandés «ha elegido convertir una larga amistad con Israel en una hostilidad abierta, precisamente durante un momento difícil para el país, probablemente por intereses políticos».
Los ministros vetados han calificado la medida como un «boicot» y afirman que continuarán con su cometido en Gaza aunque signifique «plantarle cara al mundo entero».
«Mucho más que mi entrada en los Países Bajos, me importa que mis hijos, nietos y bisnietos, y los de todos los judíos del mundo, puedan vivir en el Estado de Israel con seguridad durante décadas y siglos», ha señalado Smotrich en su cuenta en X.
Por su parte, Ben Gvir ha afirmado que aunque le «prohíban la entrada a toda Europa», seguirá actuando «por el bien» de Israel. «Exigiré que aplastemos a Hamás y apoyemos a nuestros combatientes», ha reiterado en su cuenta de X.
«En un lugar donde se tolera el terrorismo y se acoge a los terroristas, un ministro judío de Israel es indeseable, los terroristas son libres y los judíos son boicoteados», añade.