Nil Moliner fue el protagonista de uno de los últimos episodios de ‘Viajeros Cuatro’, en el que ejerció de guía por una zona muy especial para él: Montjuic. El cantante comenzó el recorrido con una declaración sincera: «Os voy a enseñar un poco la zona de Montjuic, que le tengo mucho cariño», dejando claro que no era una visita cualquiera, sino un paseo por sus recuerdos y emociones.
Desde el Mirador del Alcalde, Nil compartió una de las postales que más le inspiran. Con la ciudad extendiéndose a sus pies, señaló una de sus imágenes preferidas: «Es increíble porque se ve una parte muy importante de Barcelona, de hecho, es como de mis favoritas, porque se ve la Sagrada Familia«. Esa vista, según contó, le transmite una energía especial y le conecta con su identidad barcelonesa.
Nil Moliner, en ‘Viajeros Cuatro’
A lo largo del paseo, Nil destacó lo que más aprecia de vivir en la capital catalana. Para él, tener naturaleza tan cerca es un privilegio: «Aquí tenemos la montaña cerca y el mar cerca», dijo, valorando el entorno. Lo dijo con convicción, y no dudó en añadir con una sonrisa: «¡Eso es increíble! Es de las cosas que más me gusta».
Entre miradores y recuerdos, el artista también abrió una pequeña ventana a su pasado. Rememoró su primer concierto como público, que resultó ser toda una revelación. «Fue El canto del loco. Ahí dije: ‘yo quiero estar ahí arriba algún día’«, confesó emocionado. El escenario no era otro que el mítico Palau Sant Jordi, al que describió como «un campo de batalla increíble», un lugar que marcó su camino artístico.
Nil Moliner, en ‘Viajeros Cuatro’
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La ruta finalizó en un rincón espectacular: las piscinas de Montjuic. Allí recordó que incluso artistas de talla internacional han elegido ese espacio para grabar. «Esto también está muy guapo», comentó, señalando, además, que la cantante Dua Lipa había rodado un videoclip allí.
