España se ha despertado con una triste noticia en el mundo de la aviación: un avión An-24 ruso se ha estrellado en el extremo oriente del país, cerca de su destino, sin supervivientes a la vista. Un suceso que ya ha sido atribuido a un mal funcionamiento de la aeronave.
El An-24 o más bien Antónov An-24 es un avión de transporte que data de los años 50-60, nada menos. Cuenta con una dilatada historia de aviación, después de que su primer vuelo se celebrase en el año 1959.
Tal es su recorrido que este avión ha servido a las fuerzas aéreas chinas y ha volado en la época de la Unión Soviética, con una producción que finalizó el pasado año 1979. A pesar de contar con más de 60 años a sus espaldas, el avión sigue usándose a día de hoy.
Se estrella un An-24 en Rusia
Estamos ante un avión dotado de dos motores turbohélice, pensado para transportes de corto y medio alcance. Estos dos Ivchenko AI-24 permiten a este avión conseguir velocidades de crucero de unos 450 kilómetros por hora.
Su autonomía puede superar los 2.000 kilómetros en carga máxima, y cuenta con un total de 44 asientos. Se diseñó específicamente para reemplazar al ya obsoleto IL-14, precisamente para transportar pasajeros en pistas precarias y a bajas temperaturas.
Antonov A-24B estacionado.
Omicrono – Wikimedia Commons
Su diseño precisamente afianza esta idea, ya que sus dos motores están alzados respecto al ras de pista con un acabado de ala alta. Esto está ideado para que los motores y las palas no choquen con los escombros que se levantan a la hora de aterrizar en pistas hechas de tierra, sin pavimentar.
La clave del Antónov An-24 es que es un avión muy sencillo de volar, con poco equipo a bordo y que requiere un mantenimiento mínimo, por lo que es más barato de utilizar. A eso hemos de añadirle un muy buen rendimiento con los años y un fuselaje resistente.
Su producción cesó en el año 1979, pero en algunos países del mundo sigue produciéndose con otras denominaciones. Es el caso de China, que mediante la Xi’an Aircraft Industrial Corporation siguen fabricando este avión, bajo el sobrenombre Xian Yunshuji Y7 para cuestiones industriales.
Pese a los años que tiene este avión, en el mundo siguen usándose cerca de 880 modelos en servicio, respecto a los más de 1.000 construidos en todos estos años. En 2010 se contabilizaron casi 300 aviones en uso por aerolíneas civiles y 500 en fuerzas militares.
Antonov A-24B.
Omicrono – Wikimedia Commons
Un detalle importante es que el An-24 sirvió como base para desarrollar aviones míticos, como el avión de transporte táctico An-26 o el avión de reconocimiento An-30. Esto no ha impedido a Rusia desarrollar numerosísimas variantes de este avión.
Solo en la denominación An-24 contamos más de una veintena de variantes, si no tenemos en cuenta los modelos desarrollados que usan este avión como base. Todos ellos mejorando sus capacidades de potencia, espacio para pasajeros e introduciendo novedades como motores a reacción y similares.