La natación artística española prolongó la fiesta que está viviendo en los Mundiales de Singapur y, tras el triunfo de Iris Tió en el solo libre femenino, sumó su quinta medalla en la ciudad asiática tras colgarse el bronce en la final de la rutina técnica por equipos.
Una final que reflejó el cambio de ciclo que se ha producido en la natación artística con el triunfo de China, que arrebató por algo más siete puntos la medalla de oro a una Rusia que en su retorno a la competición no pudo prolongar la sensacional racha que le permitió encadenar once títulos mundiales consecutivas entre 1998 y 2019.
Impresionante palmarés que no parece intimidar al equipo español, que, como aseguró la entrenadora Andrea Fuentes antes de viajar a Singapur, se ha fijado como objetivo en este ciclo olímpico derrotar a las rusas. «No sé cuánto tardaremos, a lo mejor son dos semanas o a lo mejor cinco años, pero vamos a por ellas. No hay que frustrarse si a la primera no pasa, porque ya nos estamos acercando mucho», señaló Fuentes.
Tal y como volvió a comprobarse este martes en la piscina del Arena de Singapur, ya que si el equipo ruso aventajó a España en 7,0542 puntos en la final, esa diferencia se redujo a 5,7608 unidades. Un pequeño paso, pero a fin de cuentas un nuevo paso adelante, que premió el vibrante ejercicio del conjunto español, que puso a bailar a toda la piscina con su interpretación del Everybody de los Backstreet Boys.
Lideradas por Iris Tió, que esta madrugada ya dio su particular ‘sorpasso’ y se proclamó nueva campeona de mundo en la final del solo técnico femenino, el equipo español no sólo brilló, como ya es habitual, en la impresión artística, sino también en la ejecución.
Una brillante actuación que permitió a España, que se coronó el pasado mes de junio campeona de Europa con este mismo ejercicio, mejorar su nota de la preliminar tanto en lo artístico como en lo técnico para contabilizar un total de 294,8575 puntos.
Insuficiente para arrebatar el segundo escalón del podio a una Rusia que con su trepidante interpretación de la ‘Danza del Sable’ de Aram Khachaturian se colgó la medalla de plata con una puntuación de 300,6183 unidades. De nada le valió a las de españolas superar en más de tres puntos en la impresión artística al conjunto ruso, ya que el mayor grado de dificultad del ejercicio de las eslavas, les permitió superar al conjunto español.
Algo de lo que tendrán que tomar nota Andrea Fuentes y sus pupilas que presentaron la rutina con menor dificultad, casi cuatro puntos menos que Rusia, entre los aspirantes al podio.
China se confirma como el nuevo equipo a batir
Una circunstancia que no impidió a España recortar igualmente su diferencia con China, que se confirmo como el nuevo equipo a batir, tras revalidar el oro que ya conquistó el pasado año en Doha con unos espectaculares 307,8001 puntos.
El conjunto español, que este martes no alineó a Dennis González, que sí formó parte el equipo que se colgó el domingo la medalla de bronce en la rutina libre, redujo a 12,9426 puntos las más de diecisiete unidades a las que concluyó la ronda preliminar del combinado chino.
Un ‘mordisco’ insuficiente para discutir el triunfo a una China que con su interpretación de la rutina ‘Wukong’ volvió a ser la mejor, tanto en la ejecución como en la interpretación artística, donde se nota, y de qué manera, la mano de la exseleccionadora española Anna Tarrés.