Seren está embarazada y su madre, Efsun, ha insistido en que empiece clases de yoga para relajarse. Pero lo que parecía una tarde de relax ha terminado en un momento desgarrador que ha empeorado la relación entre madre e hija.
Todo ha sucedido durante la visita de Sevda, una joven encantadora que ha llegado a casa para dar la primera clase de yoga. La química con Efsun es evidente. Se ríen, comparten anécdotas y una confesión lo ha cambiado todo. “Me ayudó mucho en la universidad, con la beca y todo”, ha dicho.
Seren se ha levantado sin decir palabra, fingiendo que iba a por agua. Pero por dentro, algo se ha roto. Minutos después, ha estallado: “Cuando yo estudiaba, me dijiste que me buscara la vida. Que aprendiera a salir sola. Trabajaba de camarera, remendaba zapatos… y mientras tanto tú le pagabas todo a otra”.
Efsun ha intentado justificar lo injustificable. Le ha dicho que Sevda venía de una familia pobre, pero su hija no ha querido escuchar más. “¿De verdad pensaste que la pobreza era un juego que yo tenía que experimentar?”, le ha preguntado.
Sin poder contenerse, Seren ha subido a su cuarto y no puede perdonarla. Efsun, rota, se ha quedado en la cocina llorando. ¿Qué pasará entre madre e hija?